Cada vez son más las personas que deciden que no quieren ser enterradas y prefieren que su cuerpo sea incinerado. Luego está la cosa de dónde se tiran las cenizas. Normalmente suele ser en lugares especiales que ha elegido esa misma persona, el sitio donde quiere que descansen sus restos. Sin embargo, puede que no se te haya pasado por la cabeza enviar las cenizas al espacio. ¿Es posible? Parece que cada vez está más cerca. Eso sí, el capricho de que tus restos descansen a lo largo de la Vía Láctea no sale especialmente barato.
Llevar las cenizas al espacio es un proyecto de Andrea Santos, una joven de Lugo que espera que su empresa para enviar las cenizas de una persona fallecida al espacio esté cada vez más cerca. Santos, que ha concedido una entrevista a Nius, es abogada especializada en Derecho Espacial y en la actualidad trabaja en el departamento legal de una empresa de ingeniería aeroespacial. La ambición de su proyecto es tal que profesionales de diferentes ámbitos están colaborando con ella.
La idea, cuenta al medio, “surgió hace tres años, durante una conversación con mi padre y tras la pérdida de alguien muy importante en mi familia. Me pregunté, ¿por qué no hay un adiós más significativo para las personas que queremos?”. Así fue como empezó a formarse su empresa, Stardust Space.
Su empresa se encargará de todo menos de la última fase, la del lanzamiento, de la que se encargará SpaceX, la compañía de Elon Musk. Su empresa “enviará a la familia la capsula de aluminio para introducir las cenizas de la persona fallecida. Cada cápsula llevará un kilo de ceniza. Es importante que sean solo polvo, por lo que tendrán que pasar una doble validación a través de rayos X”, todo ello para no generar basura espacial.
Un mes antes del lanzamiento las cápsulas tendrán que enviarse a Estados Unidos, ya que en cada uno solo podrán ir 100. “Cuando la nave lance las cenizas a la órbita la cápsula de aluminio se autodestruirá, las cenizas se fusionarán en la órbita y poco a poco irán decayendo por la tracción de la tierra y se desintegrarán en la atmósfera, convirtiéndose en polvo estelar”, explica Santos.
Y la gran pregunta que probablemente te estarás haciendo: ¿cuánto costará descansar en el espacio? Según cuenta, el servicio tendrá un precio de 24.000 euros donde entra todo el proceso, incluso que la familia viaje a Estados Unidos para ver el lanzamiento.