Lidiamos con ellas todos los días cuando navegamos por internet, pero el 57% de la población española reconoce que no sabe lo que son. Incluso aunque estés familiarizado con las cookies o galletas digitales es muy probable que hayas aceptado unas cuantas sin tener claro para qué sirven.
"Las cookies nos permiten ofrecer nuestros servicios. Al utilizar nuestros servicios, aceptas el uso que hacemos de las cookies". Este suele ser el mensaje que aparece cuando entras en una página web. Y casi sin pensarlo simplemente le damos a Aceptar. Pero ¿qué estamos aceptando exactamente? En Uppers hemos hablado con Luis Corrons, Security Evangelist de la compañía de seguridad digital y privacidad Avast, para que nos cuente todo lo que necesitamos saber sobre ellas.
¿Qué son las cookies?
Las cookies son como una tarjeta de identificación compuesta por pequeños fragmentos de información en forma de texto que ayudan a los ordenadores a interactuar con los sitios web. En concreto, permiten que estos recuerden información, como los inicios de sesión o los artículos almacenados en un carrito de la compra online, y registran la actividad de navegación de un individuo para que los anunciantes puedan utilizarla para la publicidad dirigida.
Es importante entender el concepto de cookies porque, según el último estudio de Avast en el marco de su campaña #AcceptAllCookies, el 60% de los españoles acepta las cookies digitales, pero más de la mitad no sabe qué son ni cómo funcionan.
¿Cuál es su función?
Las cookies digitales son una parte esencial de la navegación por Internet, pero hay tres formas diferentes de utilizarlas:
Páginas visitadas anteriormente: Las cookies pueden (aunque no siempre) registrar las páginas que has visitado en un sitio concreto. Por ejemplo, las cookies almacenan los artículos que has mirado al comprar en Amazon o los destinos y hoteles que has explorado en Booking.com.
Datos de acceso: Las cookies pueden almacenar datos personales, como direcciones IP, identificadores en línea (ID de usuario, ID de dispositivo, ID de marketing, etc.), información de inicio de sesión, sistema operativo, navegador o configuración de idioma.
Seguimiento estadístico del sitio web: Las cookies permiten a los responsables de marketing comprender mejor cómo los visitantes han encontrado un sitio web y cómo han interactuado con él. Su objetivo es mejorar el sitio web, mejorando la experiencia del usuario.
¿Qué significa aceptar las cookies cuando entro en una web?
Al aceptar las cookies, estás dando permiso a los sitios web para rastrear información sobre ti, como tu actividad de navegación, tu historial de búsqueda y tus datos de acceso. Es importante recordar que los sitios web no pueden acceder a las cookies de otros sitios ni verlas, por lo que cada sitio web te pregunta, lo que te permite controlar quién tiene acceso a tu información.
Si se rechaza el uso de cookies, es posible que no se pueda disfrutar de una experiencia de usuario completa en determinados sitios web. Esto podría incluir tener que iniciar sesión cada vez que vuelva a un sitio web, o que no se recuerde su historial de navegación anterior, lo que haría que su experiencia fuera menos fluida y ágil de lo previsto. Algunos propietarios de sitios web pueden no permitirte usarlos por completo si no aceptas las cookies, aunque esto es poco frecuente.
¿Qué tipos de cookies debo aceptar y cuáles no?
El usuario tiene pleno control sobre sus datos e historial de navegación y no está obligado a aceptar las cookies en ningún caso. Las cookies permiten hacer un seguimiento del usuario, pero no almacenan información privada como las contraseñas. Sí conservan información que puede parecer inofensiva pero que en cierto modo supone una invasión de la privacidad, creando un retrato muy aproximado del usuario.
Algunas personas consideran que no aceptarlas se trata de un pequeño sacrificio para mantener la seguridad de sus datos digitales. Lo importante es evitar los sitios web no cifrados, que no tienen el pequeño candado, es decir, el certificado SSL, que confirma que el sitio web pertenece a quien dice ser, y no es una página falsa que busca engañar a los usuarios.
¿En qué me beneficia aceptar las cookies?
Los sitios web las utilizan para agilizar la experiencia en Internet. Sin embargo, hay que diferenciar entre dos tipos de cookies: las cookies de origen están destinadas a mejorar el servicio que presta el sitio web a sus usuarios, gracias a la personalización del proceso. No recogen su información personal ni la utilizan con fines publicitarios. También son útiles durante la compra por Internet. Si surge un problema que te impide completar el proceso de compra, las cookies de origen te ayudan a recordar los artículos de tu cesta de la compra, para que no tengas que volver a buscar los productos.
Sin embargo, las cookies de terceros pertenecen a alguien que no es el propietario del sitio web, por ejemplo, una plataforma de tecnología publicitaria. Su propósito principal es rastrear la actividad del usuario en la web, y a veces se utilizan para proporcionar servicios de terceros, como funciones de chat en vivo. No son esenciales para navegar correctamente y deben evitarse.
¿Cuánto tiempo dura una cookie en mi dispositivo?
El tiempo que una cookie permanecerá en tu ordenador o dispositivo móvil depende de si es una cookie "persistente" o "de sesión". Las cookies de sesión sólo permanecerán en el dispositivo hasta que dejes de navegar. Las cookies persistentes permanecen en tu ordenador o dispositivo móvil hasta que caducan o se eliminan.
¿Qué pasa si las borro?
En su mayoría, las cookies tienen una función determinada y simplifican el funcionamiento del sitio web. Si borras una cookie, es posible que ciertas funciones del sitio web no funcionen correctamente o no estén disponibles para ti. Por ejemplo, si se borra la cookie que se utiliza para gestionar o asociar su cesta de la compra con una tienda online, es posible que ya no haya productos en tu cesta de la compra y/o que no puedas completar el pedido. Por otra parte, si no aceptas la cookie que supervisa el inicio de sesión, es posible que no puedas conectarte.
¿Puedo navegar por Internet sin aceptar ninguna cookie?
Sí, pero es posible que algunas funciones del sitio web no funcionen correctamente o no estén disponibles para ti. Y casi todos los sitios web utilizan cookies, ya que éstas están diseñadas para agilizar y mejorar la experiencia del usuario. Al igual que una receta de cocina, las galletas digitales deben ser tratadas con cuidado.
Lo primero es tener los ingredientes necesarios, es decir, aceptar sólo las galletas digitales que realmente se necesitan para navegar correctamente. Luego podemos considerar que el ingrediente secreto de las cookies es una pizca de seguridad, con un antivirus o un navegador anti-seguimiento que proteja la privacidad del usuario.
A continuación, hay que preparar el horno, es decir, configurar el navegador para navegar por Internet de forma segura. El último paso es limpiar, al igual que limpiamos los utensilios una vez terminada la receta, en Internet debemos borrar las cookies del historial de navegación.
¿Por qué recibo tantas advertencias sobre su uso?
Las cookies pueden hacer que te sientas vigilado. Pueden seguirte de un sitio a otro. Así, si buscas un nuevo teléfono en Amazon, otras páginas podrían acceder a esa información de las cookies y ofrecerte anuncios específicos para ese dispositivo (o dispositivos de la competencia). Si te interesan esos "enlaces relacionados", bien; si no, pueden parecerte intrusivos. Las cookies también pueden afectar al rendimiento del dispositivo. Demasiadas pueden ralentizar tu ordenador.
Las cookies no son intrínsecamente malas, pero recogen y almacenan datos personales. Por esta razón, la UE ha promulgado leyes que obligan a los sitios web a informar a los usuarios de que se están recogiendo datos sobre ellos. Con el tiempo, acumularás cientos o incluso miles de cookies, y deshacerte de ellas periódicamente es una parte importante de tu higiene general de privacidad.
¿Por qué se llaman galletas?
El término cookies fue acuñado por el programador de navegadores web Lou Montulli. Se derivó del término "cookie mágica", que es un paquete de datos que un programa recibe y devuelve sin cambios, utilizado por los programadores de Unix. En la práctica, el concepto de galletas hace un guiño a las galletas dulces porque dejan migas, y al igual que quien come galletas deja un rastro de migas al comerlas, lo mismo ocurre en Internet.