El ruido es uno de los principales problemas a los que se deben enfrentar los habitantes de las grandes ciudades. Además de las molestias que pueden ocasionar los vecinos en una alocada noche de fiesta, los habitantes de estas grandes urbes también deben enfrentarse al ruido procedente de los restaurantes, bares y zonas de ocio, al de las obras de nueva construcción, al de los aviones y, especialmente, al del tráfico automovilístico, que concentra alrededor del 80% del ruido que se sufre en las grandes ciudades.
Vivir en un ambiente extremadamente ruidoso tiene graves consecuencias tanto para la salud, y no solo a nivel auditivo. Según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), vivir expuestos a ruidos con un volumen superior a 65 decibelios por la mañana y a 55 por la noche aumenta ampliamente el riesgo de sufrir problemas auditivos, psicológicos y fisiológicos, así como todos aquellos vinculados con la falta de sueño y descanso.
En concreto, el ruido puede provocar pérdidas de audición, irritabilidad, estrés, agresividad, ansiedad e insomnio. Además, está relacionado con incremento de la presión arterial y de la frecuencia cardíaca y respiratoria. Sin embargo, y pese a todos los problemas que la contaminación acústica puede generar, actualmente se calcula que uno de cada cinco europeos están expuestos a niveles de ruido que se consideran nocivos para la salud, según los datos de la Agencia Europea de Medio Ambiente (EMEA, según sus siglas en inglés).
Cuando un ruido nos resulta molesto, lo notamos enseguida, sobre todo si ese ruido aparece por las noches. Sin embargo, para medir el nivel de ruido que hay a nuestro alrededor hace falta mucho más que nuestra mera percepción.
Afortunadamente, gracias a los avances tecnológicos alcanzados en los últimos años ahora podemos saber cuál es el nivel de ruido exacto que nos rodea con nuestro teléfono móvil, aunque para ello debemos descargarnos previamente alguna aplicación que pueda convertir nuestro dispositivo en un sonómetro.
Tanto en la App Store como en la Play Store podemos encontrar varias opciones. Sin embargo, dada la precisión que ofrece, las dos alternativas más recomendables son Sound Meter, en el caso de que utilicemos un teléfono Android, o NIOSH Sound Level Meter, en caso de que usemos un teléfono Apple.
En el caso de NIOSH Sound Level Meter, esta app se caracteriza por ofrecer las mejores características de los medidores de nivel de sonido y los dosímetros de ruido profesionales en un paquete simple y fácil de usar. Desarrollada por ingenieros acústicos experimentados y expertos en pérdida auditiva, la app es completamente gratuita y cuenta con pantallas informativas actualizadas sobre los ruidos que se consideran peligrosos y las directrices para prevenir la pérdida auditiva, entre otros.
En el caso de Sound Meter, esta app utiliza el micrófono que lleva incorporado el teléfono móvil para medir el volumen del ruido en decibelios, que muestra en la pantalla. La app dispone de una interfaz sencilla, por lo que leer las mediciones es bastante sencillo. No obstante, tiene problemas para medir con precisión los ruidos que superen los 90 decibelios.
Además de estas aplicaciones, también podemos encontrar otras opciones como Decibel Meter Pro, que destaca por su cuidada interfaz, Too Noisy Pro, una versión enfocada a controlar el ruido que se produce en las aulas de los más jóvenes, o SPLnFFT Noise Meter, una app que combina un medidor de nivel de presión sonora con un analizador de espectro recomendada y que ha sido recomendada expertos en salud, pero que cuenta con el hándicap de ser de pago y estar disponible solo en inglés.