Teletexto: ¿para qué se usa y cuándo desaparecerá?

En España, muchos ciudadanos siguen utilizando recursos más tradicionales para mantenerse informados, lo que significa que internet aún no ha conseguido expandirse tanto como para absorberlo absolutamente todo. Nos referimos al Teletexto, una tecnología de la televisión que precedió a la Web. En Uppers vamos a explicar cuánto tiempo le queda al teletexto en España y para qué se usa todavía el teletexto.

El invento del Teletexto se le debe al británico John Adams que trabajaba para la cadena BBC, con lo cual fue la primera en todo el mundo que lo estrenó en Reino Unido. Corría el año 1974, aunque ya a principios de 2020 esta cadena cerró el sistema.

El Teletexto consiste en un servicio de información en forma de texto y que se transmite aprovechando la señal de la televisión. A través de los textos que se crean se ofrece a los telespectadores la posibilidad de acceder a información de forma gratuita: noticias, resultados deportivos, programación, previsión meteorológica, tráfico en carretera, alertas de seguridad, horóscopo, anuncios publicitarios y un largo etcétera.

Al principio, el protocolo propio de la BBC era el Ceefax que después sustituyó por el Botón rojo, ya que pulsando ese botón en el mando de la televisión se accedía a las noticias de sus cadenas. Mientras, Oracle, que estaba especializada en soluciones informáticas desarrolló un servicio alternativo al que llamó Teletexto. Las cadenas de otros países como Austria, Alemania, Francia, Holanda o Japón también lo pusieron en marcha.

En realidad, el sistema del teletexto, que tiene limitaciones técnicas, es anterior a la World Wide Web (www) en cuanto al proceso necesario para consultar información. Precisamente, el invento de la Web llegó mucho más tarde, en 1989 y a manos de otro británico, el científico Tim Berners-Lee. En internet se tiene que esperar un tiempo a que la web que se busca se cargue, pues lo mismo sucede con el teletexto. Antes, había que ir avanzando hasta llegar a la página de información deseada. Después, las televisiones analógicas anularon esta espera.

El arranque del Teletexto en España fue en 1988 y TVE se ocupó de la implantación. Hasta ese momento solo era posible informarse de la programación a través de publicaciones en papel de modo que rápidamente captó muchos usuarios. También comprobaron la utilidad del sistema ya que con el mando de la televisión y sus botones de colores podían ver los resultados de los partidos de futbol, consultar quién había ganado una carrera de fórmula 1 o el tiempo, leer los titulares de las noticias nacionales e internacionales, los resultados de los sorteos como La Lotería o la Quiniela y después la Bonoloto…

El servicio siempre ha sido gratuito y el único requisito es que la televisión estuviera encendida y el cable de la antena conectado. Además, es muy intuitivo porque cada página responde a un número de tres cifras que se teclea con el mando y las secciones se organizan por colores. Después, al mismo tiempo que se fueron incorporando al panorama televisivo las cadenas privadas como Tele 5, Antena 3 o Canal + fueron añadiendo sus propios sistemas de información de teletexto.

Según publicó hace unos años un informe de RTVE, el Teletexto todavía está disponible en el 99,3% de los hogares españoles. Incluso, los datos recogidos reflejan que hay unos dos millones de personas que siguen utilizándolo a diario. Principalmente, lo usan para consultar el horóscopo o los anuncios, los cuales son los que financian el mantenimiento del servicio.

Incluso, en 2020 se hizo público que en el centro penitenciario de A Lama, en Pontevedra, un juzgado había eliminado la opción de consultar el Teletexto en las televisiones que utilizaban los presos porque aprovechaban el servicio para comunicarse con el exterior. Para ello aprovechaban páginas abiertas de citas, contactos o anuncios donde a través de seudónimos, palabras-clave, páginas y horas concretas enviaban mensajes fuera de la cárcel. Esta actividad podía poner en riesgo la seguridad del centro penitenciario y por ello desde los juzgados se prohibió el Teletexto y se capó la posibilidad de que se accediera al servicio desde cualquier televisión.

La duda es hasta cuándo las cadenas de televisión españolas van a seguir manteniendo el servicio de información que ofrece el Teletexto. Además, nuestro país es el único en Europa en el que está activo junto con Alemania.