El miedo a olvidarse de las contraseñas y otros obstáculos de los mayores para hacer gestiones online
La brecha digital en los mayores se ha reducido en los últimos años pero sigue siendo un problema para ellos
El principal problema de los mayores es que piensan que las webs no están adaptadas para que ellos las usen
El miedo a dar datos personales y la dificultad para recordar contraseñas son otros de los problemas a los que se enfrentan
La brecha digital es una realidad pese a que se ha conseguido ir reduciendo con los años, especialmente después de 2020, el año en el que la tecnología fue clave en la comunicación debido a los confinamientos ocasionados por la pandemia de la covid-19. Según datos del barómetro UPD sobre la evolución de la brecha digital en personas mayores, el 40'5% de ellos asegura no haber accedido nunca a Internet, frente al 53'3% que lo afirmaba en 2019. No obstante, un nuevo estudio señala el miedo de los mayores como una de las principales barreras para lanzarse al mundo digital.
El miedo a tener que facilitar datos personales o la dificultad que creen presentar para recordar contraseñas son dos de los principales obstáculos que frenan a los adultos mayores a la hora de digitalizarse y comenzar a hacer gestiones online desde un dispositivo. Estas son algunas de las conclusiones extraídas de un estudio elaborado por investigadores de la Universidad CEU San Pablo y miembros del Grupo de Investigación BRECHDIG-Brecha Digital y Personas Mayores publicado en International Journal of Electronic Government Research.
MÁS
Los problemas a los que se enfrentan
Para llegar a unas conclusiones se realizó una encuesta telefónica a 405 personas de entre 60 y 79 años que usasen Internet. Estos se dividieron en varios grupos dependiendo de su forma de usar la red y la percepción que tenían de la Administración electrónica. Para utilizar más este servicio público, los mayores reclaman que se simplifiquen los contenidos y el diseño de las webs, además de que esté mejor adaptada a sus necesidades introduciendo, por ejemplo, un asistente de ayuda mientras resuelven sus gestiones telemáticas o una unificación de contraseñas, solo tener una clave de acceso más sencilla de recordar.
El estudio señala diferentes tipos de mayores a la hora de hacer trámites online: recelosos, confiados, cautelosos y reservados, concentrándose el mayor número de personas en el grupo de los recelosos. Leopoldo Abad, uno de los principales autores de la investigación, destaca sobre ellos que su principal barrera para utilizar estos servicios es "el miedo a proporcionar sus datos personales y la dificultad para recordar las contraseñas".
Inseguros con las gestiones online
También identifica a otros grupos que no utilizan las herramientas de la Administración: temerosos, críticos, optimistas, indiferentes y desanimados, siendo los temerosos los más numerosos en este caso. "Son muy inseguros y cautelosos en su relación con la administración electrónica y eso les impide hacer uso de ella. Se muestran interesados en que las webs fueran más sencillas y les ayudaría a realizar trámites online poder consultar dudas por teléfono", explica Abad.
Entre el resto de los perfiles destacan los confiados, que no tienen problema alguno en usar las herramientas digitales, pero sí que consideran que el diseño web debería ser más sencillo para los mayores. En todo caso, las principales peticiones de los mayores se sitúan en adaptar las web para su uso más sencillo, incentivar su uso y dar más facilidades para que dar datos o recordar contraseñas no sea un muro para ellos.