El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ya lo avisó: "Estamos uniéndonos contra nuestros aliados europeos para encontrar e incautar vuestros yates, vuestras casas de lujo y vuestros jets privados. Vamos a por vuestras ganancias mal engendradas".
Tras una semana desde que Vladímir Putin ordenase una invasión en Ucrania, las empresas de los multimillonarios más poderosos de Rusia están hundidas en la Bolsa; sobre la mayor parte de estos oligarcas pesan las sanciones de Occidente.
Para todos está en la memoria la figura del opositor, Mijail Jodorovski, propietario de la petrolera Yukos, que fue condenado a nueve años de cárcel. A pesar del miedo que genera el régimen, algunos de los empresarios muestran su desacuerdo con la decisión del Kremlin de seguir haciendo la guerra. La opinión es expresada con prudencia y ninguno menciona directamente al presidente de Rusia, lo que supone un signo de amplias fisuras entre las voces rusas. Lo han hecho en prensa, a través de sus redes sociales, e incluso en una carta a los empleados de su compañía. En el vídeo, te contamos quiénes son.
Los hijos de estos magnates, como Sofía Abramóvich, han expresado en su cuenta de Instagram su enfado con Putin y la guerra en Ucrania. Su padre, Roman Abramóvich, uno de los oligarcas rusos que aparecen en la lista de sancionados y que está buscando un comprador para el Chelsea FC, no ha hecho ninguna declaración contra Putin, pero quiere crear una fundación caritativa para ayudar a las víctimas de la guerra en Ucrania.