Si en enero de este año alguien te cuenta que ha visto una película donde una pandemia mundial colapsa al mundo entero, donde de repente muere muchísima gente y la economía entra en recesión, no te lo crees.
Pero además, y mientras todo se para, en la película el virus ataca de forma muy rápida y más de 200 laboratorios empiezan una carrera por llegar cuanto antes a una vacuna que salve al mundo entero. Un guión de película mala de superhéroes. Eso es lo que estamos viviendo. Un momento histórico con un mal guion. Pero eso no debería de ser malo, si ocurre como en los guiones previsibles, que cuando algo sale mal en el desarrollo de esa vacuna, paralizan su proceso para estudiar bien lo que está ocurriendo y seguir con la máxima seguridad posible. Pues eso: vísteme despacio (podría ser el título de la peli).
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