'Las meninas', 'La fragua de Vulcano' o 'Felipe IV, a caballo' son solo un pequeño ejemplo de la extensa obra de Diego Rodríguez de Silva y Velázquez. Comenzó a practicar el arte de la pintura en Sevilla, su ciudad natal, hasta que a los veinticuatro se marchó a servir a la corte real en Madrid. Allí se dedicó a pintar retratos de la familia real, de cortesanos y viajeros distinguidos. Además de cuadros, también realizó multitud de deberes administrativos. Entonces, ¿con qué tiempo contaba nuestro genio para hacer sus grandes obras? Antonio García Villarán nos explica en este nuevo episodio de 'Vaya cuadro' algunas de las teorías que existen en torno a la autoría de sus cuadros. Puedes verlo en el vídeo.
El catálogo de Velázquez consta de más de un centenar de obras. Aunque es un pintor barroco, su reconocimiento no llegó hasta el siglo XIX, coincidiendo con el auge de los impresionistas franceses, para los que el artista sevillano fue un referente. La mayor parte de sus obras se conservan en el Museo del Prado.