Hoy vengo a acabar con un bulo muy extendido: El perro NO es el mejor amigo del hombre. El mejor amigo del hombre es el chiringuito: con esa sombrilla, ese acodamiento bien colocado, la santa birrita y la gloriosa tapa. La conversación con el camarero filósofo mirando al horizonte. Ese sentirte abrazado por el chiringuito. Eso es un amigo. Por favor.