Armie Hammer, de gran promesa de Hollywood a tener que vender su camioneta: "Ya no puedo pagar la gasolina"

En 2017 Armie Hammer parecía estar a punto de dar el gran salto a la liga de las grandes estrellas de Hollywood tras su rol en 'Call me by your name', la icónica película de Luca Guadagnino, pero todo se fue al traste desde que en 2021 se viese envuelto en unas graves acusaciones de conductas violentas, abusos e incluso de violación, torturas y canibalismo. Con su reputación herida de muerte, la industria del cine le canceló fulminantemente y fue despedido de todas las producciones que tenía firmadas, lo que terminó conduciendo al actor, de 38 años, primero al divorcio de su mujer y después a la bancarrota.

Aunque el intérprete procede de una familia adinerada, su situación económica no era tan cómoda como podía esperarse. Antes incluso de su caída en desgracia ya se enfrentaba a graves problemas monetarios, consecuencia de haber renunciado a su herencia a los 19 años porque quería ser actor, en contra de los deseos de su progenitor. Llegó a confesar que si tuviera que pagar cierta deuda que tenía con Guadagnino estaría completamente en quiebra, situación a la que terminaría llegando de todas formas.

En junio de 2021 Hammer ingresó en un programa de rehabilitación en Florida para tratar sus problemas con las drogas, el alcohol y el sexo. Salió de allí nueve meses después con la firme intención de repensar su estilo de vida, y también sus gastos. Una de las decisiones que ha tomado para reajustar su situación financiera es vender su querida y valiosa camioneta.

En una publicación en sus redes sociales, Hammer aparece junto al vehículo y explica su situación: "Voy a vender mi camioneta. Desde que regresé a Los Ángeles, le puse unos 400 o 500 dólares en gasolina y no puedo pagarla. Ya no puedo pagar la gasolina".

Pese a lo traumático de la situación, el actor parece haber encontrado ya una solución más económica para sus desplazamientos: "¿sabes qué? No pasa nada. Tengo un coche nuevo. Es pequeño. Es un híbrido. Probablemente gastaré unos 10 dólares de gasolina al mes, y eso es todo".

Hace unos meses el actor de 'El llanero solitario' se abría en el podcast 'Painful Lessons' y explicaba que había llegado a un punto de su vida en el que apreciaba cada aspecto de lo que ha pasado, a pesar de lo doloroso que hubiera sido. Reconocía que carecía de autoestima y que dependía de la admiración externa para llenar sus vacíos emocionales, y que el escarnio público le habían llevado a encarar y trabajar aspectos de su vida personal que antes había ignorado.

Hammer afirmaba en esa charla que nunca había sido sido "más feliz que ahora", tras haber sido “cancelado” y haberse enfrentado a sus demonios. Y aunque admitía estar "completamente arruinado", también parecía decidido a reinventarse. De momento, tiene planes de escribir un guion inspirado en su propia vida. La venta de su camioneta y su sustitución por un vehículo más económico parece fruto de ese nuevo enfoque vital más pragmático.