Del Delorean a la Nostromo: muere Ron Cobb, el creador de casi todo lo que molaba en el cine de los 80
Fue el creador de los primeros bocetos de algunas de las naves más importantes de la historia reciente del cine, como la Dropship de Aliens (1996)
Aunque el nombre de Ron Cobb no diga mucho en una primera oída, no sería descabellado afirmar que el cine de los 80 hubiera sido totalmente diferente sin sus bocetos. El dibujante y diseñador estadounidense, leyenda del diseño conceptual en la esfera cinematográfica, falleció ayer a los 83 años, en el día de su cumpleaños. Hablamos de la persona que diseñó algunas de las naves y vehículos más importantes de la historia reciente del cine, como el Delorean de Regreso al Futuro (1985); la nave Nostromo, de Alien (1979) o los seres de la Cantina de Mos Eisley en el episodio IV de Star Wars (1977).
El mundo del cine también le recordará por haber creado las avionetas nazis en Indiana Jones: En busca del Arca Perdida, la primera película de la saga, que se estrenó en el 1981 y catapultó a Harrison Ford al éxito. También por ser el padre de la nave Dropship, en Aliens (1986), una de sus mejores creaciones. Toda la idea de la nave Narcissus corrió de su mano; los objetos de la tripulación, los símbolos de la nave... Su legado ha inspirado los diseños de otras películas recientes, como Moon (2009).
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Comenzó su andadura en el cine cuando tenía 18 años, haciendo fotogramas de transición en Disney. Allí participó en 'La Bella Durmiente', en el año 1959; más tarde fue despedido. Después de una etapa en el ejército, colaboró en medios de comunicación como ilustrador satírico. Sin embargo, terminó por reorientar su carrera profesional hacia el cine: su primer trabajo importante fue diseñando la nave de 'Dark Star', la película debut de John Carpenter. Fue adquiriendo fama y participó en multitud de proyectos cinematográficos. Casi siempre estuvo vinculado a películas futuristas; era allí donde sus obras despuntaban.
Incluso hizo un cameo en una película. Fue en Conan el Bárbaro (1982). Tanto el propio Conan como el ambiente, los animales, las vestimentas o las armas que aparecen en la película fueron dibujados en un primer momento por él. Se trata de una de las obras en las que más huella dejó. Su impacto en la película fue tal que apareció como vendedor de Loto Negro.