'Otra ronda': ¿es cierta la teoría científica de que eres mejor con un 0,05 % de alcohol en sangre?
'Otra ronda', del director Thomas Vinterberg, ha conseguido el Oscar a Mejor Película Internacional
Cuenta la historia de cuatro profesores de instituto infelices que deciden probar una teoría supuestamente acuñada por el escritor noruego Finn Skarderud
Se parte pues de la premisa de que el ser humano tiene un déficit del 0,05% de alcohol en sangre. Pero, ¿qué hay de cierto en ella?
Scott Fitzgerald, Ernest Hemingway, Charles Bukowski... Algunos de los grandes genios de la literatura eran, también, fanáticos del arte de beber. Muchas de sus grandes obras fueron creadas en estados de embriaguez, lo que ha potenciado el mito de que cierta dosis de alcohol puede hacernos más creativos y, en definitiva, acercarnos a la mejor versión de nosotros mismos. Pero claro, no hay que olvidar que se trata de una romantización del alcoholismo, nada más y nada menos que una grave enfermedad. 'Otra ronda' (2020), del director danés Thomas Vinterberg y galardonada como Mejor Película Internacional en los Oscar (aquí puedes ver la lista completa de galardones), juega justo a esa ambivalencia, que todos hemos sentido cerca, y que le ha servido muy buenas críticas, hasta el punto de conseguir la nominación a los Oscar por Mejor Película Internacional y Mejor Dirección.
'Otra ronda'
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La cinta cuenta la historia de cuatro profesores de instituto con sus respectivos sueños frustrados, afectados por una insatisfacción vital crónica que les empuja a probar la teoría del psiquiatra noruego Finn Skarderud, quien asevera que los humanos nacen con un déficit del 0,05 % de alcohol en sangre. Esta circunstancia les coarta de ser la mejor versión de sí mismos. Así que los profesores ponen en práctica el experimento.
Las tesis del psiquiatra noruego han provocado un aluvión de preguntas sin respuesta: ¿es cierto que nuestra mejor versión depende el alcohol en sangre? ¿Tan importante es el alcohol en nuestra forma de relacionarnos y trabajar? ¿Beber alcohol puede ser una solución real a los problemas sociales que acarrean las personas?
Sobre la teoría
Lo primero que hay que decir es que el propio Skarderud desmintió haber dicho lo que se le ha puesto en boca. En un artículo publicado por el portal noruego Psykologisk, el psiquiatra y escritor afirmó que nunca había formulado una teoría así. "Me han citado erróneamente con entusiasmo. Una vez escribí un ensayo, un prefacio de un libro italiano clásico sobre la psicología del vino, y tuve algunas formulaciones que luego fueron completamente sacadas de contexto. Esto luego terminó en un guion creativo". Reconoció, al mismo tiempo, que la película le pareció "maravillosa".
"Me han citado erróneamente con entusiasmo", explicó Psykologisk.
El libro al que se refiere Skarderud se titula 'Sobre los efectos psicológicos del vino' y fue publicado por Edmondo de Amicis en el año 2000. En él, el escritor noruego reflexiona más que categoriza. El artículo publicado en Psykologisk, en los que ofrece una aproximación científica respecto al objeto de la película, aunque siempre en base a suposiciones:
"En un mal día, es fácil imaginar que el hombre está mal construido. Está mal pensado y los mismos pensamientos cuelgan. Se murmura a sí mismo. Y lo rotas en relación los demás. es fácil imaginar que el hombre está mal construido.Una posible explicación es que la corteza del cerebro humano es simplemente demasiado delgada
"Luego viene el vino. Después del primer y segundo vaso, comprende cuál es el veradero error. Eso era lo que faltaba. Se llega rápidamente a la conclusión de que en realidad uno es creado con menos 0,05 %. Triste.
El propio Finn lo confirma: el 0,05 % de déficit de alcohol en sangre es una conclusión, una suposición, pero en ningún caso un dato contrastado científicamente.
¿Qué dice la ciencia?
Mayoritariamente, que la relación entre el alcohol y la capacidad cognitiva no es del todo buena, incluso cuando el consumo es ciertamente ocasional o moderado. Un estudio publicado en la revista científica British Medicine Journal (BMJ) en el año 2017, cuyo objeto de estudio era el consumo moderado de alcohol como factor de riesgo en resultados cerebrales adversos y deterioro cognitivo, es claro al respecto.
"El consumo de alcohol, incluso en niveles moderados, se asocia con resultados cerebrales adversos, incluida la atrofia del hipocampo", concluye la investigación. Rechaza, al mismo tiempo, que haya ningún tipo de efecto protector del consumo ligero sobre la abstinencia. "El mayor consumo de alcohol también se asoció con diferencias en la microestructura del cuerpo calloso y una disminución más rápida de la fluidez léxica. No se encontró ninguna asociación con el rendimiento cognitivo transversal".
Así pues, ¿somos brillantes con dosis bajas de alcohol? Puede que exista alguna estimulación desde el punto de vista creativo, pero tal y como se señala en la película, no parece una buena idea a largo plazo. Es más, hay que tener mucho cuidado con la cara b del consumo de alcohol.