Roberto Santiago (Madrid, 1968) siempre tuvo un sueño infantil: estaba obsesionado con los libros que le hubiera gustado leer de niño. Hace diez años, llegó a la conclusión de que tenía tomar cartas en el asunto. Así nacerían las aventuras Pakete y compañia , los chicos del dudoso equipo de futbol de El Soto Alto, y protagonistas de la saga ilustrada 'Futbolísimos' (pronto aparecerá el volumen 24), a cuyas aventuras tus hijos de vienen enganchando desde hace años.
Pero no ha sido su única incursión en la temática del fútbol, como cineasta ya había hecho 'El penalti más largo del mundo', done Fernando Tejero es le portero de un equipo de tercera que tiene que atajar un penalti suspendido durante una semana."El fútbol es una fuente narrativa maravillosa. A mí no me interesa el fútbol de los grandes fichajes millonarios - sostiene-. Del fútbol que yo escribo es del fútbol base, ese deporte donde el trabajo en equipo y la empatía real con los demás es posible. Así ha sido en “Los Futbolísimos” o en mis películas sobre el tema. Me encanta el fútbol, verlo, jugarlo (de eso hace ya mucho), inventar historias sobre ese mundo. Solo puedo escribir de aquello que realmente me apasiona".
Hace ya diez años de 'Futbolísimos' ¿como nace la idea de esta saga de libros infantiles tan exitosas?
'Los Futbolísimos' nacen de un sueño infantil, son los libros que a mí me habría gustado leer cuando era niño. En aquella época, aunque parezca increíble, no había libros de fútbol. Mucho después, en 2011, hablando con mi editora Berta Márquez, surgió la idea de juntar fútbol, misterio y amistad en una colección.
¿Tardaste mucho en publicarlo? ¿Cómo fue el proceso desde la escritura hasta la publicación?
El primer libro tardé casi dos años en escribirlo. Yo tenía muy presente “Los Cinco” de Enid Blyton, los primeros libros a la que estuve enganchado como lector. Estuve acompañado durante el proceso en todo momento por la editorial, fue un camino emocionante, lleno de dudas y de una enorme conexión con el niño que fui.
¿Te imaginaste que el éxito que llegaría a tener? 20 libros, traducciones, una película…
Es un sueño, jamás pude imaginar que llegaríamos tan lejos con “Los Futbolísimos”. Y aún les queda mucho por delante. Siguen entrando nuevos lectores a la colección, es increíble la capacidad de conexión que tienen estos libros con toda una generación de niños.
Los niños, mi hijo, sin ir muy lejos, conocen a los personajes como si fueran sus amigos. ¿Qué tienen que tener los personajes para que los niños los sientan tan cercanos?
Creo que esa es la clave: que los lectores se sienten muy identificados. A todos les gustaría formar parte de esa pandilla. A mí también, je, je. Los personajes son antihéroes, imperfectos, y también muy buenas personas, eso es muy importante.
¿Qué les depara el futuro a Pakete y compañía?
Acaba de llegar a las librerías “El misterio de la casa encantada” y ya estoy escribiendo el siguiente libro, ¡el 24! Y el año próximo… se rodará la segunda película de la saga. Quién sabe hasta dónde llegarán Pakete y sus amigos, depende sobre todo de lo que quieran los lectores.
Guionista, novelista, director… ¿Hay alguna de esas facetas en la que te sientas más cómodo?
Ante todo, soy escritor. En el más amplio sentido de la palabra. Novelas, guiones de cine y televisión, teatro… Por supuesto, también me encanta dirigir, es muy nutritivo compartir un proceso creativo con tanta gente. Pero es en la escritura donde encuentro mi lugar natural.
¿Qué te llevó a la novela infantil o juvenil en primer lugar? ¿Por qué no empezaste con novela para adultos?
No fue una decisión, nunca he planificado mi carrera. Ocurrió así. Nada más salir de la Escuela de Letras donde estudié, tuve una idea muy nítida para escribir una novela, se titulaba “El ladrón de mentiras”, el narrador era un niño de diez años y se convirtió en mi primera novela. Estoy muy orgulloso de ello.
¿Escribir novela juvenil o infantil es “más fácil”?
En mi opinión, la dificultad de la escritura no depende del formato ni del género, sino de la ambición de cada historia. Hay algo que se dice mucho, y que en mi experiencia he comprobado que es cierto: los niños son los lectores más exigentes, no tienen paciencia ni filtro, si algo no les interesa, lo abandonan de inmediato. Hay que hacer un enorme esfuerzo para conectar con ellos, para atraparles en la lectura. Es un reto precioso.
Desde la publicación de 'Ana', tendrás que firmarle libros tanto a padres como a hijos ¿cuál es tu lector favorito?
Cualquier lector que se acerca con un libro mío para que se lo firme me parece un acto de amor que intento corresponder con agradecimiento y cariño. Una cosa muy emocionante, muchísimo, que me pasa con cierta frecuencia, son padres que me dicen: “mi hijo, o mi hija, no leía nada, sin embargo, gracias a tus libros, se ha convertido en un gran lector”. Por cosas así, todo merece la pena.
'La rebelión de los buenos' los protagonistas son gente común que en un momento dice: “somos pequeños, pero estamos juntos y mordemos juntos”. Parece algo que dirían también los Futbolísimos…. ¿Tienes debilidad por los grupos de marginados o marginales?
Me encantan las historias donde los “buenos” se unen para luchar juntos. Ya sea un grupo de niños, o un puñado de abogados. No recordaba esa frase exacta, pero al releerla ahora me ha gustado mucho, “mordemos juntos”, exacto, ese es el espíritu.
¿Siempre has tenido claro quienes son “los buenos” en tus historias?
En realidad, los buenos también tienen su lado oscuro y sus defectos. Eso es lo que les hace interesantes. Tanto en la literatura como en la vida, tal vez podemos saber quiénes son los buenos por descarte, porque lo cierto es que a los malvados se les distingue por sus actos. Tal vez soy un poco ingenuo, pero tenía muchas ganas de darle voz y protagonismo a los buenos, estoy un poco cansado de que los malos se salgan con la suya.
Tu libro es es un thriller con fondo social y critica, además. a los poderes multinacionales… se dice pronto. ¿Siempre tuviste esa voluntad crítica? ¿Cómo se combate al sistema desde el sistema?
La voluntad crítica yo creo que es inherente a la literatura. Aquel que escriba desde el conformismo con lo establecido o con el poder, creará una literatura muy poco interesante. Por supuesto, yo sí que acepto las reglas del sistema, las reglas que nos hemos dado entre todos. Pero también creo que es saludable intentar cambiarlas. Ojalá más rebeliones. Además, el thriller es un vehículo perfecto para la denuncia social, para colocar un espejo frente a la realidad y lanzar preguntas que nos hagan pensar. Siempre a través de una historia que enganche al lector, por supuesto.
¿Dirías que el paso del tiempo te aleja de la literatura infantil y juvenil? ¿Hacernos mayores hace que dejemos unos temas y abordemos otros?
No pienso alejarme nunca de la literatura infantil y juvenil. Me apasiona. Es un reto continuo. Claro que quiero seguir creciendo y aprendiendo como escritor, pero sin renunciar a ningún género ni formato.
Has guionizado tus propios libros cuando han dado el salto al audiovisual ¿es indispensable para ti?
Ahora por ejemplo se está preparando la segunda película de 'Los Futbolísimos' y no voy a participar en el guion. Me encanta que otros creadores lancen su mirada sobre lo que yo he escrito. Como autor, se sufre un poco al ver que tu historia se cambia, pero también descubres cosas que ni tú mismo sabías de tus personajes y tu libro. Depende de cada caso. En “La rebelión de los buenos”, si da el salto al audiovisual, querría acompañarla en ese viaje.