Borea El leonés, el gladiador hispano que triunfó en el Imperio romano

"¡Spaniard! ¡Spaniard! ¡Spaniard!". El origen español del personaje de Russell Crowe, Máximo Décimo Meridio en 'Gladiator' (2000), es revelado en la cinta de la manera más poética: "Mi casa esta en las colinas de Trujillo, un hogar simple, cantera rosa al sol, una cocina, un jardín con olor a hierba en el día, a jazmín en la tarde, en la puerta hay un álamo, higos, peras, manzanas, la tierra es negra como el cabello de mi mujer, hay vides al sur, olivos al norte..."

En la década de los 50 fueron halladas en Córdoba una serie de lápidas con inscripciones que, según los expertos, guardaban registro de algunos de los gladiadores hispanos más notables de la provincia Bética, por entonces una de las más ricas del Imperio romano. No en vano en ella estaba el tercer anfiteatro más grande del mundo. En el habrían luchado guerreros como Quintius Vettius Gracilis, el gaditano Smaragdo o Marcus Ulpius Aracintus.

Entre ellos, sin embargo destacaba un gladiador nacido en Beduina (actual Cebrones del Río, en la provincia de León) que fue portador de una tésera -una especie de insignia o placa reconocida entre los romanos como prenda de vestimenta de jefes tribales o intermediarios oficiales con otras naciones o tribus. Su nombre era Borea, y según explicaba a El Diario el experto en gladiatura Fernando Barriales era lo que se conocía como un 'provocator', uno de los primeros combatientes de los juegos “Su tésera es absolutamente excepcional por ser la única que hay en bronce y muestra la importancia que llegó a tener Borea porque es el material más noble posible para hacerla”, sostiene. La distinción le había sido entregada por un lanista procedente de la actual localidad ourensana de Xinzo de Limia llamado Celer posiblemente en el año 64 d.C.

El 'provocator' luchaba con escudo de legionario y espada corta, además de llevar un peto o protector en el pecho. El casco tenía dos viseras y no tenía ala, para evitar ser enganchado en las redes de los retiarius –los gladiadores sin armadura conocidos por llevar un tridente y una red- y un protector de brazo llamado 'manica'. “Borea era el más famoso de la época junto con Spiculus, el favorito de Nerón, del que se conservan tres citas literarias y dos epigráficas, pero el que tiene la tésera de bronce, del material más noble, es el beduniense; con lo que mientras no se encuentre otra igual de la época podemos asegurar que era el que más prestigio tenía entonces” dice Barriales en la misma nota.

'Bóreas' significa literalmente 'viento del norte' en latín, pero en asturleonés 'boria' significa “niebla” y 'boriada', “tormenta repentina”, por lo que es posible que el nombre Borea tenga que ver con alguno de estos significados o incluso con una combinación de todos ellos.  Así, “el que surge entre la niebla y golpea de repente” podría sr un buen nombre para un gladiador como Borea, el verdadero "hispano".