Barbara Loden, la cineasta olvidada de Hollywood que rodó solo una película y se inspiró en un crimen real

Mujeres que se ven reflejadas en otras mujeres. Como espejos. Aunque entre ellas existan años, décadas, de diferencia que las separan. Esa podría ser la definición del hilo que une a la escritora y editora francesa Nathalie Léger con la actriz y directora norteamericana Barbara Loden, y, a su vez, a esta con la protagonista de la única película que dirigió: 'Wanda'.

"Escribió el guion inspirándose en la crónica de un suceso que apareció en los periódicos de la época: una mujer había sido acusada de atracar un banco, su cómplice había muerto y ella había comparecido sola ante el tribunal. Nada mas reconocer su condena de veinte años de cárcel, le dio las gracias al juez. (...) Lo que Barbara se cuestionaba entonces era ¿Qué dolor y que desesperanza pueden mover a alguien a desear estar confinado? ¿Cómo puede alguien sentirse aliviado de que lo encarcelen?", explica la autora de 'Vida de Bárbara Loden' (Sexto Piso, 2022) en su libro.

La figura de la actriz y cineasta Barbara Loden está llena de misterio y un halo de nostalgia. Algo que llamó la atención (y obsesionó) a Léger tras descubrir su existencia en el 2010. Sea realidad o ficción, la autora nos cuenta la historia de Barbara tras recibir un encargo para escribir una breve entrada sobre ella en un diccionario de cine. Un trabajo que derivó en el libro que tenemos ahora en las manos. Para ello, la escritora inicia una investigación, recupera archivos, entrevista a testigos, consulta a expertos y viaja a Estados Unidos para conocer las localizaciones de 'Wanda'.

Muchos desconocen la existencia de esta actriz y directora de cine norteamericana, que únicamente rodó una película como directora, 'Wanda', a sus 38 años. Una cinta que también protagonizó, porque como ella decía: "I was the best for it" ("Yo era la mejor para hacerlo").

Nacida en Carolina del Norte en 1932, el mismo año que Elizabeth Taylor, Delphine Seyring y Silvia Plath, Loden tuvo una infancia complicada y solitaria y se mudó a Nueva York con 16 años. Fue modelo 'pin-up' y bailarina en clubes nocturnos antes de matricularse en el Actors Studio y debutar en Broadway.

En el cine, sus primeros papeles fueron en 'Rio Salvaje' (1960) y 'Esplendor en la hierba' (1961) de Elia Kazan, con el que estuvo casada y formó parte de algunos de sus films más icónicos. Kazan la definía como una mujer "salvaje, original, insolente y socarrona". Pero ella fue una pionera, una mujer fuerte y luchadora que consiguió sacar adelante una película sin apenas apoyo, ni moral, ni económico. Una figura olvidada del cine de Estados Unidos que rescata la novela de Nathalie Léger.

"Barbara Loden es Wanda y Wanda es Barbara Loden", como se explica en este libro que es una joya para descubrir y profundizar en la vida de la actriz, y en su película de 1970.

Esta cinta cuenta la historia de Alma Malone, la mujer que pasó una década en la cárcel tras un intento de secuestro y robo, y que se alegró de ingresar en prisión por lo desdichada que era su vida. Barbara descubrió su caso en el periódico, en las páginas de la sección de tribunales del Sunday Daily News del 27 de marzo de 1960, donde aparecía publicada la crónica del juicio. Y le cautivó.

La película fue criticada por feministas de la época que no veían con buenos ojos la pasividad y sumisión de la protagonista ante la figura masculina, pero la propia Loden lo aclaraba entonces: "El personaje de Wanda está basado en mi vida y en mi personalidad, así como en mi forma de entender la vida de los demás. Todo lo creo a partir de mis vivencias. Todo lo que hago soy yo".

Ganó el premio de la crítica en el Festival de Venecia pero no tuvo un gran éxito comercial. En una entrevista con Marguerite Duras, admiradora del filme, Kazan contó que Loden sufrió porque nunca logró financiar ninguno de sus siguientes proyectos. Una falta de apoyo que padeció hasta su muerte.

"Fui una mujer muerta en vida", afirmaba Loden en una entrevista con Michael Climent en 1975. "Era como Wanda. Estaba desnortada, anestesiada. No había nada que justificara mi existencia. Afortunadamente, no me costó interpretar el papel de Wanda porque es muy pasiva, y en lo emocional, me siento muy afín a ella", afirmaba. Una sensación de soledad que quiso reflejar en esta cinta, ahora de culto.

Otro de los pasajes del libro que más cautivan es aquel en el que se relata cuando Barbara Loden fue invitada al programa de Yoko Ono y John Lenon en 1972, durante el 'Mike Douglas Show, a daytime television talk show'.

Fue Yoko Ono la que propuso la participación de Barbara Loden, reconociendo su gran trabajo como cineasta. Un momento histórico de la televisión en el que entrevistan a la directora y después interpretan un tema de la artista, con su Yoko Ono Band y una radiante Barbara pandereta en mano.

Barbara Loden estaba preparada para dirigir una película sobre 'El despertar', el libro de de Kate Chopin, cuando fue diagnosticada de un cáncer de mama por el que murió en el Hospital Mount Sinai en la ciudad de Nueva York el 5 de septiembre de 1980.

El libro sigue la línea de las ideas que solían atraer a Loden: "Considerada a menudo como la Madame Bovary criolla, la protagonista, Edna Pontellier, es una mujer burguesa que entra en crisis al poner en duda el papel del matrimonio y la maternidad, manifiesta abiertamente su deseo sexual y decide romper con toda la seguridad que le otorga su privilegiado estatus social", reza la sinopsis.

Nathalie Léger tiene claro que a Barbara "la admirable novela de Kate Chopin le habría permitido profundizar en muchos de los temas que la fascinaban: ¿qué es el deseo?, ¿somos libres de elegirlo, y de culminarlo?, ¿cómo es el proceso de autoafirmación?".

"Fue la muerte, sí, la que le impidió completar este nuevo proyecto, pero no debemos olvidar la lucha que llevó a cabo entonces y las dificultades que encontró. ¿Una mujer cineasta en 1970? ¡Si se contaban con los dedos de una mano! ¿Nos podemos imaginar el inmenso esfuerzo que la antigua pin-up, una actriz notable, sí, pero que trabajó poco y a la que Hollywood no apoyaba, una mujer terriblemente constreñida por todos los estereotipos de la época, además, tuvo que hacer para triunfar? Admiro enormemente la determinación de Barbara Loden”, concluye la escritora, que ahora rinde homenaje a una pionera que no debió ser nunca olvidada.