Paul McCartney está de cumpleaños: el niño rechazado del coro que se convirtió en icono cumple 80
Este sábado se celebra su cumpleaños, una fecha redonda que festeja toda una vida de éxitos
Venerado como otras figuras nacionales como la reina Isabel II, McCartney se ha convertido en un icono británico
Junto a John Lennon, George Harrison y Ringo Starr hizo historia, y continúa siendo un referente mundial
El mundo de la música está de celebración. Una de las figuras más importantes del mundo cumple 80 años, Paul McCartney. Y aunque no podrá celebrarlo con el que fue el amor de su vida, musa, amiga y compañera sentimental Linda, sí que recibe el cariño y el amor de fans, músicos y artistas de todo el globo.
James Paul McCartney nació en Liverpool en 1942, en el seno de una familia modesta. Su madre, una comadrona, su padre, músico. Y aunque en su infancia varios obstáculos parecían impedirle seguir su sueños de convertirse en artista, su perseverancia y pasión consiguió hacer realidad su meta. Esta claro: la música (y el mundo en general) no sería el mismo sin Paul.
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¿Sabias que no fue aceptado en el coro de Liverpool? Quien le iba a decir a aquel niño desilusionado que su vida daría un giro de 360 grados. Recuperamos algunos de los momentos clave de sus 80 años de vida.
El pequeño Paul
Que Paul iba a dedicarse al mundo de la música era casi algo predestinado. Su padre era músico de jazz y desde pequeño aprendió las claves de la música. Ya de joven tocaba el piano, y aunque su padre le propuso tomar clases Paul prefería tocar de oído.
Es entonces cuando decide apuntarse al coro de la Catedral de Liverpool. Pero tras la prueba, fue rechazado. Según se ha dicho, alguien opinó que no cantaba lo suficientemente bien para formar parte del grupo. Paul no quería rendirse, y quería perseguir sus sueño así que comenzó a juguetear con la guitarra acústica. Pero como no lograba tocarla bien con la mano derecha se desilusionó, hasta que se topó con una foto de Slim Whitman, un músico norteamericano de country que tocaba como zurdo. En ese momento invirtió las cuerdas y comenzó a dominar el instrumento. Comenzaba una nueva era.
Inspirarse de sus caídas
Después del duro golpe de no poder entrar en el coro donde tenía pensado mejorar su canto, vino uno mayor que fue la muerte de su madre, cuando él solo tenía 14 años. "Mi madre murió cuando tenía catorce años y fue un gran shock en mis años de adolescencia. Ella murió de cáncer, me enteré más tarde. Yo no sabía entonces por qué ella había muerto. La muerte de mi madre destrozo a mi padre. Eso fue lo peor para mí, oír llorar a mi padre. Nunca lo había oído llorar antes. Fue un golpe terrible para la familia", ha relatado el músico, que bautizó a su primera hija con el nombre de Mary, como su madre.
Paul dijo que compuso 'Let It Be' después de soñar con su madre durante un momento de tensión en las sesiones de The Beatles (el álbum blanco) en 1968: "Me encantó volver a conversar con mi madre. Me sentí bendecido por tener ese sueño. Eso me hizo escribir 'Let It Be'. Todo va a estar bien, déjalo estar (let it be)".
Y aunque este fue otro bache en el camino, Paul continuó luchando por su sueño.
Del coro a los pubs
Aunque el coro de Liverpool no supiera ver su talento, el camino de Paul le llevó hasta los Quarrymen, un grupo que tocaba rock y skiffle, cuando él tenía 15 años. Es allí donde conoció a John Lennon, con el que estableció una gran amistad.
Paul sumó a la banda a un guitarrista más joven que él al que había conocido en el colectivo que los llevaba al colegio. Se llamaba George Harrison, y así poco a poco se fue hilando la historia que todos conocemos hoy en día.
Comenzaron tocando en pubs y bares, y en el mítico The Cavern, para después hacer giras mundiales con masas y masas de fans que gritaban enloquecidos sus nombres. Fueron, son y serán una leyenda.
Icono de masas
Así nació un icono, y un referente británico. El periodista norteamericano Rob Sheffield afirma que Paul es el más Beatle de los Beatles. "Si te gusta Paul, te gustan los Beatles". Lo cierto es que uno de los miembros que más ha protegido la esencia de la banda y que abanderado el grupo a lo largo de los años.
Aunque se retiró a una granja en el sureste de Inglaterra con su hija Mary y cuatro de sus ocho nietos, no ha dejado de crear. De esa etapa salió el álbum 'McCartney III', publicado en diciembre de 2020 y que alcanzó el número uno en las listas británicas.
En la canción 'When I'm Sixty Four', un jovencísimo Paul McCartney se imaginaba jubilado a los 64 años. Pero esta leyenda del pop británico ha soplado hoy 80 velas, y continúa tan activo como siempre. A por otros 80 años, y con más música, eso siempre.