Hace un año que Enrique Bunbury anunció que se retiraba de los escenarios tras más de 30 años de carrera por problemas con su voz en los conciertos, él mismo aclaró que en su día a día no los tenía. Hace unas semanas el artista supo por fin qué era lo que le pasaba. Había desarrollado una intolerancia al glicol, una sustancia que está presente en la mayoría de los efectos de humo que se utilizan en los conciertos. A lo largo de este tiempo se ha refugiado en la creación de un libro, ‘Microdosis’ (editorial Cántico), que acaba de salir a la venta y en el que relata sus dos años consumiendo una droga.
Bunbury ha estos consumiendo microdosis de psilocibina durante dos años. Se trata de una sustancia alucinógena que proviene de algunos hongos que la generan y que estudios recientes han relacionado como remedio terapéutico frente a la depresión y otros estados de ánimo. El cantante titula su obra como ‘Microdosis’ porque es lo que ha tomado, entre 125 y 250 miligramos, y lo ha querido relatar, dando como resultado este libro.
A lo largo de las páginas el que fue vocalista de Héroes del Silencio explica, entre otras cosas, haber sufrido una depresión profunda o problemas de comunicación y dificultades en cuanto a la relación con el entorno, señalando cómo le ha afectado la ingesta de esas microdosis de psilocibina. Bunbury llega a retroceder a lo largo de sus páginas hasta su adolescencia o algunas de sus aventuras en Los Ángeles, donde reside.
Tal y como relata, esas microdosis le han permitido sentir “algo de euforia, de emoción y de mínima conexión con un mundo que parece esquivarnos, que nos expulsa considerándonos inútiles, incapaces si no comulgamos con tres o 400 normas no escritas y toda la legislación vigente, que es mucha y nadie en su sano juicio sería capaza de siquiera leer ni aplicándose con devoción extrema en la suma total de las encarnaciones”.
A pesar de haber abandonado los escenarios, no ha dejado la música. Su voz en estudio ha seguido sonando como siempre, sin los problemas que le causa el humo de los conciertos, por eso hace solo unas semanas anunciaba su nuevo disco, ‘Greta Garbo’, que saldrá a la venta el próximo 26 de mayo.
A lo largo de todo este periodo ha sido cuando ha escrito estas nuevas canciones en las que manifiesta la rabia y la impotencia por no poder subirse a los escenarios, pero también refleja la esperanza de poder seguir haciendo música.
“En bastantes de las canciones incluidas en el disco aparece una mezcla de inquietud y entusiasmo ante algo que podríamos denominar el ‘síndrome de Greta Garbo’. La famosa actriz sueca decidió abandonar la escena cinematográfica a la edad de 36 años, en el cénit de su carrera. Las circunstancias me hicieron pensar en que, aunque siguiera escribiendo y componiendo, alejarme de los escenarios provoca una distancia con el público no del todo deseada”, expuso Bunbury en el comunicado del lanzamiento de su nuevo trabajo discográfico.