A todos, alguna vez, se nos quedó enganchada la cinta con el tema 'Como hemos cambiado' en el cerebro. Así que cuando veo a Sole Giménez atravesar la madrileña Plaza Santa Ana para encontrase conmigo, tomo nota mental: "no le hables de la maldita canción". LLega sonriente y algo cansada. "Si te dieran un euro por cada vez que alguien te cita 'Cómo hemos cambiado'..." le espeto nada más tenerla delante. ¿Qué? Vosotros haríais lo mismo. Sole se ríe con algo de resignación: "Hombre, ya tendría algún dinerillo ahorrado", dice. Al parecer, no le molesta en absoluto la alusión a un tema que grabó hace más de 30 años con un grupo que dejó hace 17.
Presuntos Implicados es cosa del pasado, sí, pero esa maldita canción parecía premonitoria: que lejos a quedado aquella amistad, cada paso que se dio, algo más nos alejó, lo mejor que conocimos separó nuestros destinos. Ya saben. Cuando más adelante le pregunte por aquello que dijo del mal rollo cuando dejó la banda, me dirá cortésmente que prefiere no hablar del tema, que muchas veces se han sacado de contexto sus palabras. De momento estamos aquí para hablar de sus 40 años en la música, que se dice pronto, y de el nuevo disco '¡Celebración!' (grabado en directo durante un concierto en el Palau de les Arts de Valencia, el pasado febrero), con el que conmemora su ya dilatada carrera. Una auténtica celebración que la llevará a estar un año y medio de gira y en la que ha escogido muchos de sus grandes éxitos a los que ha dado un aire nuevo, en parte gracias al acompañamiento de cantantes como Antonio José, Miguel Poveda o Joan Manuel Serrat.
¿En estos 40 años has pasado algún día sin cantar?
Reconozco que muy pocos. Alguna vez por descanso, o porque hay periodos en los que no hay grabación o no hay conciertos. Pero en general soy muy cantarina, tengo mucha música en la cabeza. ¡A veces ni me doy cuenta que estoy cantando! Es como respirar para mí.
¿Recuerdas el momento en el que supiste que ibas a dedicarte a eso? ¿Hubo un momento epifánico de esos?
A mi me costó ¿eh? Yo empecé muy jovencita. Con 11 años empecé a cantar en el coro de la iglesia y ahí ya la monja, que era colombiana, me puso a cantar en solitario. Pero a mí no me parecía nada excepcional. Y luego ya con Presuntos recuerda que yo empecé cantando coros. A mi me costó mucho reconocer que no lo hacía mal. Y ya hubo momento en el que estábamos metidos en harina y dije, pues mira va a ser que soy cantante más que otra cosa. Pero si te digo la verdad, en el grupo tampoco me sentía tan excepcional, era como "alguien tiene que cantar" y ya está. Me molestaba esto de ser la protagonista.
Ahora ya no te molestará tanto...
Una se acostumbra a todo. Aunque hace 17 años que yo lidero este equipo, me gusta sentir que soy parte de algo. Quiero tener las cosas claras y poder hacerlas a mi manera, pero una vez puestos yo soy una parte más. El otro día tenía discusiones por los videos de este disco porque me sacaban a mí mucho y yo pensaba que eso no era lo que pasó, que éramos un grupo tocando. La música la puedes hacer en solitario, pero para que aquello cobre vida tiene que ser en conjunto. Es uno de los regalos que te hace la música: aprender a ser una pieza más.
Sole, los cuarenta en la música ¿serían los nuevos que?
¡Los nuevos 20! Yo no me siento como si tuviera cuarenta años en la música, te lo juro. Me siento como si llevara veinte. Es que no me lo creo. Me sigue ilusionando, me lo sigo pasando bien. Tengo muchos proyectos, este que ahora sacamos me parece precioso, tengo muchas ganas de compartirlo con la gente. Siempre digo que no solo yo cumplo 40 años en la música sino que muchos cumplimos 40 años escuchando estas canciones y quiero compartirlo con ellos, porque ellos hicieron grande al grupo. Por eso se llama '¡Celebración!' porque es una celebración conjunta.
Tu música tiene siempre ese sonido adulto, o al menos así se le etiqueta... ¿Cómo definirías tú esta 'música para adultos'?
Es una música que no suele ser tan fácil de escuchar, que necesita un criterio por parte del oyente, necesita una paciencia y una querencia. Tiene otra profundidad y es más rica. No es tan directa.
Y tú siempre has hecho este tipo de música, incluso de más joven.
Siempre. Nunca me ha gustado el pop fácil. Lo he disfrutado, me he divertido... Pero, no tengo idea de por qué, siempre busqué otra cosa. A ver, de chica me gustaban Los diablos, por ejemplo, y todo bien, pero cuando escuché a Victor Manuel, dije "yo quiero esto". O Serrat. Y luego cuando descubro la música negra pienso "esto es mi mundo". Es una música muy rica armónicamente.
O sea que artistas como Shakira o Rosalía...
No es algo que disfrute demasiado. Las puedo escuchar, claro. El disco de Rosalía 'El mal querer' no me parecía una mala oferta, pero creo que ahora está en un punto que a mí no me llega. Shakira también me gustó mucho en su primera época, pero ahora se ha convertido en otra cosa.
Vamos que no te gusta el giro al reguetón...
Exactamente, y eso me preocupa. Me gusta que implementen cosas como el ballenato y eso, pero me parece todo muy desvirtuado. Creo que es una tendencia que empobrece la música. Tiene que haber ofertas diferentes y sí que las hay, pero si las compañías no las apoyan... No se está fomentando el criterio de la gente más joven. Y me preocupa porque no sé qué música van a oír dentro de 40 años.
¿Y Nathy Peluso, por ejemplo?
Es una gran cantante, que tiene un concepto claro, pero este disco que ha hecho me parece muy ecléctico. Hay cosas que me gustan muchísimo y otras que no me gustan tanto. A mí de Naty, y de mucha gente, lo que me chirría como mujer es tirar tanto del físico...
Bueno, hay una cuestión del empoderamiento sobre el cuerpo...
Querido, el empoderamiento sobre el cuerpo con una visión absolutamente patriarcal ¿qué quieres que te diga? Déjame que me lo cuestione. Porque no sé si es un empoderamiento femenino o es un empoderamiento con una visión muy masculina. Habría que pensar en eso. Tengo mis problemas con ese tema. Dicho esto, quiero decir que creo que gente como Nathy está haciendo una gran carrera, que no se piense que estoy yo aquí para decirle a la gente lo que tiene que hacer porque a mí estas artistas me merecen el mayor respeto.
Volviendo a este disco '¡Celebración!', parte importante del mismo son los dúos que haces. ¿Cómo escogiste con quién querías cantar en este momento tan significativo?
He tenido la suerte de tener a estos tres caballeros conmigo, de distintas generaciones. Antonio José, Poveda, Serrat... Me parecen magníficos y tener la oportunidad de cantar con ellos, cada uno en su estilo, cada una a su manera y cada uno con su poder musical, me parece precioso.
Incluyes en el disco una canción de Armando Manzanero, que si no me equivoco fue una de sus últimas composiciones.
Es la última que compuso. Me lo dijo su propio hijo. Y el mismo Armando me la mandó pocos meses antes de morir. "Tengo un tema para tí", me dijo. Y me lo mandó tocado al piano por él, cantado por él... y yo me puse a llorar. Entonces me siento no solo privilegiada, sino tocada por la mano de dios. No tengo palabras para describir semejante cosa. Por eso cuando escogí el repertorio para este disco quise cantarla y hacerle este homenaje a ese grandísimo compositor.
Sole ¿que le dirías a la Sole de dentro de 40 años, que seguro seguirá cantando?
Uy, dentro de cuarenta años... ¡que se cuide mucho!