¿Qué fue de Samantha Fox, la famosa cantante que triunfó en los 80?
La cantante británica fue en los 80 un verdadero ícono sexual para millones de personas en todo el mundo
Fox, que sigue siendo una figura muy querida en Gran Bretaña, cuenta hoy día con 118.000 seguidores en redes sociales
El misterioso testamento de Aretha Franklin que apareció bajo su sofá: el reparto de su millonaria herencia
Samantha Fox fue todo un mito sexual en los 80. Su cuerpo empapelaba las paredes de las habitaciones de los adolescentes de la época que vivían enamorados de esta rubia de armas tomar. La cantante nació en Londres en el año 1966 y se hizo famosa gracias a su voluptuosa anatomía. Era muy polifacética y, además de cantar, era modelo y probó fortuna en el cine. Eso sí, Fox no rodó ninguna película X, a pesar de que corrieron rumores de que había participado en películas eróticas. Una confusión que venía de la existencia de una actriz que se llamaba igual que ella.
En el año 1986 se hizo muy famosa su canción Touch me, un single que le dio la fama suficiente para abrirle las puertas a las revistas más famosas, entre las que destaca Playboy, que hacían cola para que Samantha Fox posara desnuda.
MÁS
En los últimos años ha seguido dedicada a la música y ha participado en programas y documentales musicales sobre la década de los años 80 para cadenas como VH1. En 2005 publicó su sexto álbum de estudio 'Angel With An Attitude' cuyo single de presentación fue la canción homónima del álbum, y en 2007 se reeditó en Australia y Nueva Zelanda con una nueva versión de su 'rompelistas' 'Touch Me (I Want Your Body)'.
Un vida llena de romances
Mientras era una de las mujeres más deseadas del mundo, a Samantha Fox se la atribuyeron romances con hombres de varias nacionalidades, entre los que se encontraban el español Rafi Camino, el australiano Peter Foster y el norteamericano Paul Stanley, cantante y guitarrista del grupo Kiss. Por aquella época, la cantante hablaba en las entrevistas de su deseo de sentar cabeza, casarse y tener hijos, aunque confesaba que no le iba muy bien en el amor: “Toda la vida me ha pasado lo mismo. Ser una mujer famosa, adorada por tantos hombres, es algo muy difícil de manejar para cualquier novio. Todos mis novios han terminado con mucha inseguridad”.
Fue a finales de los años 90 cuando empezó a circular un sorprendente rumor. Samantha Fox, la sex symbol por excelencia y objeto de deseo de millones de hombres a lo largo del planeta, era lesbiana. Samantha, de hecho, había participado como jurado en un concurso de belleza para lesbianas y, en ese momento, la prensa amarilla se enteró que compartía su casa con Cris Bonacci, guitarrista de la banda de rock Girlschool.
Los periodistas insinuaron que eran amantes y Bonacci confirmó en una entrevista que estaban juntas, aunque Samantha no desmintió ni confirmó jamás la verdadera naturaleza de esa relación. Algunos periodistas posteriormente averiguaron que Samantha ya había compartido su casa con otra mujer llamada Debbie Connor, aunque ella siempre aseguró que eran “buenas amigas”.
En febrero del 2003, Samantha Fox decidió poner fin a todos los rumores sobre su vida privada y salió oficialmente del armario. En un sorprendente comunicado confesó que estaba enamorada de su agente, Myra Stratton, una mujer once años mayor que ella. “Me he acostado con otras mujeres, pero nunca había estado enamorada antes de conocer a Myra Stratton. La gente dice que soy lesbiana…. No sé lo que soy. Lo único que sé es que estoy enamorada de Myra, la amo por completo y quiero pasar el resto de mi vida con ella", dijo en esa oportunidad.
El mismo año 2003 Samantha Fox se casó con su manager. El matrimonio entre ambas duró 12 años, hasta la muerte de Myra por un cáncer el año 2015, tras batallar durante dos años contra esa enfermedad. Sorprendentemente, después de la muerte de su pareja, Samantha Fox, de actuales 51 años, confesó públicamente que se había enamorado de otra mujer. Se trataba de la noruega -y madre de dos hijos- Linda Brigitte Olsen. El pasado año, Samantha Fox anunciaba, feliz, su boda con Linda, su pareja desde hacía cinco años.
Desde entonces, la cantante y su chica no se separan: ambas viven felices en su casa de Londres junto a Adam y Noah, los dos hijos de una anterior relación de Olsen que la cantante adora como si fueran suyos. Fox, que sigue siendo una figura muy querida en Gran Bretaña, cuenta hoy día con 118.000 seguidores en redes sociales, a los que hace partícipes de su vida y de su carrera profesional.