Josep Carreras reaparece, emocionado, para recibir el Premio Talía de Honor: "Hasta siempre"
Josep Carreras ha recibido el Premio Talía de Honor a toda su trayectoria como tenor
El artista fue recibido sobre el escenario con una enorme ovación del público en pie
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Por su voz “única” y su carrera “excepcional”, Josep Carreras ha sido galardonado con el Premio Talía de Honor que otorga la Academia de las Artes Escénicas de España. “Tenor fundamental y legendario que cuenta con una voz única y una carrera excepcional. A través de la combinación de su extraordinario virtuosismo que junto a su poder escénico ha llevado la ópera, junto con sus colegas, a un nuevo y entusiasta público”, aseguró la Academia cuando anunció que sería el galardonado.
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Una voz "única"
La soprano Ainhoa Arteta fue la encargada de entregar a Carreras el galardón sobre el escenario, refiriéndose a él como un auténtico “referente”. El tenor fue recibido ante una impresionante ovación con todo el público y compañeros que ocupaban el patio de butacas del Teatro Español en pie ante él. "Es un honor", fue lo primero que dijo.
El cantante quiso agradecer a la Academia haber pensado en él para ser el galardonado con el premio a la trayectoria profesional, en especial, tras conocer que en la primera edición de los Premios Talía ese mismo trofeo se lo otorgaron a “la maravillosa Lola Herrera, así que fue aún más entrañable”. "A todos ustedes, decirles, hasta siempre", concluyó para recibir una nueva ovación.
La carrera del tenor fue meteórica. Siendo veinteañero la mismísima Montserrat Caballé le amadrinó tras quedar prendada de su talento, un impulso que hizo que antes de cumplir los 30 Carreras ya hubiese cantado en todas las grandes capitales del mundo dando lugar a una de las grandes carreras en el mundo de la ópera.
La leucemia
En plena cresta de la ola, en 1987, le diagnosticaron una leucemia linfoblástica con la que los médicos le dieron pocas probabilidades de vivir. Sin embargo, el tenor se sometió a duros tratamientos de quimioterapia y radioterapia, además de un autotrasplante de médula, con lo que el artista fue capaz de recuperarse y retomar su carrera artística.
Solo tres años después formó parte del Concierto de Los Tres Tenores con Plácido Domingo y Luciano Pavarotti y en 1991 fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de las Artes con Montserrat Caballé, Victoria de los Ángeles, Teresa Berganza, Pilar Lorengar, Alfredo Kraus y Plácido Domingo.
Crear la Fundación Carreras
Tras su enfermedad, el cantante creó la Fundación Josep Carreras “movidos por el desafío de conseguir que la leucemia sea, algún día, una enfermedad 100% curable, desde la Fundación Josep Carreras contra la Leucemia impulsamos de forma incansable todo tipo de proyectos en beneficio de los pacientes de leucemia, linfoma, mieloma múltiple y otros cánceres de la sangre, y de la ciencia”.
Lo que impulsó al tenor a crear la Fundación fue su primer ingreso, cuando tenía 40 años, una carrera asentada, se había casado y tenía dos hijos. En la habitación de al lado, cuenta, había un bebé de dos años, algo que le impactó por la tremenda injusticia que era. Él había podido vivir durante cuatro décadas miles de cosas, ese bebé no. “Ese sentimiento de impotencia unido al gran apoyo y cariño que recibí, me impulsó a crear la Fundación con el objetivo de que algún día la leucemia fuese una enfermedad curable en todos los casos”.