Paul McCartney cumple 82 años: quiénes son y a qué se dedican sus cinco hijos

Sir Paul McCartney -82 años cumplidos hoy mismo, y quizá el músico vivo más importante del s. XX- nunca quiso que sus hijos asistieran a escuelas privadas. "Producen cierto tipo de gente... gente de 'clase alta'. Nunca me ha interesado eso. Prefiero la gente común y corriente", señalaba en una entrevista en RTVE , en 1989. Poseedor de la mayor fortuna del mundo del rock, McCartney es perfectamente consciente de su enorme privilegio económico a pesar de sus orígenes más bien humildes. "Vengo de una familia de clase trabajadora y no quería que mis hijos un día vinieran a hablarme como pijos. Creo que para ellos es aún más importante porque algún día tendrán dinero, y es básico que puedan comunicarse con la gente normal, entonces su madre y yo hemos querido educarlos de la manera más normal que hemos podido".

Más allá de su cruzada paterna hacia la 'normalidad', los cinco hijos del músico se han dedicado, cada cual a su manera, a trabajos creativos, siendo Stella McCartney, la que ha logrado mayor repercusión en su campo, el mundo de la moda. 40 años separan a Heather (61), la hija de Linda, que Paul adoptara a finales de los 60 y Beatrice Milly (20), la hija que tuviera junto a su segunda esposa, Heather Mills, de quien se separó en 2006. Estas son son sus respectivas ocupaciones.

Heather Louise McCartney

Protagoniza algunos de los momentos más entrañables del documental 'Get Back', de Peter Jackson. Con apenas seis años, Heather, la hija de Linda Eastman que acaba de ser oficialmente adoptada por Paul, se paseaba a sus anchas por el estudio, jugando con John o Ringo -a quien gustaba asustar tocando los platillos- y hasta imitando los gorgoritos de Yoko Ono para solaz del personal. Hoy Heather, de 61 años, es la hija menos 'visible' de McCartney, aunque se dedica desde hace muchos años a la alfarería y su trabajo ha sido muy reconocido por la crítica.

Mary McCartney

Bautizada en honor a la abuela materna -la 'mother Mary' de 'Let it be'- Mary Anna McCartney es la primera hija biológica de Paul y Linda. Con una profunda convicción ecológica y vegetariana, heredada de su madre, Mary también ha seguido los pasos de su madre ya que se ha dedicado principalmente a la fotografía. En 2022 dirigió su primer documental, 'If These Walls Could Sing', que cuenta las historia de los célebres estudios Abbey Road.

Stella McCartney

La tercera de las hijas de McCartney se ha ganado, por derecho propio, su lugar en el mundo de la cultura popular. Junto a sus hermanos, viajó durante su infancia siguiendo a la banda Wings, pero a los 13 años empieza a interesarse en el mundo de la moda, cuando se diseñó su primera chaqueta. A los 16 ya trabajaba como auxiliar de Christian Lacroix. Debutó en 1995 con su colección de graduación, del  Central Saint Martins College of Art and Design. El resto es historia de la moda.

James McCartney

El único hijo varón de McCartney es también el único que se ha dedicado a la música, una decisión enormemente valiente dado que, bueno, es hijo de su padre. Como era de suponerse -en realidad es algo que le ha pasado a todos los hijos de los Beatles- las constantes comparaciones con su padre han hecho muy difícil que su carrera llegue a despegar realmente aunque el McCartney Jr. tenga ya algunos trabajos en estudio, incluyendo un álbum 'Available Light' (2010). De momento, uno de los puntos altos de su carrera ha llegado con la colaboración que realizó este mismo año con Sean Ono Lennon, hijo de John Lennon en el tema 'Primrose Hill' (2024)en lo que ha significado la primera colaboración Lennon-McCartney en más de cinco décadas.

Beatrice Milly McCartney

Beatrice, última hija de Paul, es la viva imagen de su padre. Fruto de un matrimonio que acabó fatal -el divorcio de McCartney y Heather Mills fue uno de los más millonarios que se recuerden- Beatrice toca el saxo, pero con 20 años apenas cumplidos, de momento se sabe poco de sus intereses. La joven vive en vive ahora en  Robertsbridge, Sussex Oriental donde, siguiendo las aspiraciones de normalidad de su billonario padre, fue a la escuela comunitaria Thomas Peacocke.