A los fanáticos les encanta imaginar posibles conspiraciones de todo tipo y la música no se libra. Con The Beatles se produjo una auténtica revolución. Fue como si millones de jóvenes despertaran de un letargo y quisieran vivir y morir solo por los cuatro músicos que componían esta increíble banda. Pero a muchos de ellos les debió afectar…
El undécimo álbum del grupo, Abbey Road, fue uno de los que más locas teorías despertó, cada cual más extraña, por la foto que lo ilustra donde todos van con zapatos menos uno. Desde Uppers hemos comprobado cómo durante años los fans se preguntaron por qué Paul McCartney aparece descalzo en la portada de Abbey Road Incluso se llegó a asegurar que estaba muerto y que le habían sustituido por un doble.
Pasadas las 11 de la mañana de un caluroso 8 de agosto de 1969, James Paul McCartney, John Lennon, George Harrison y Ringo Starr, los cuatro músicos de The Beatles, tenían que cruzar la esquina de Abbey Road y Garden Road por el paso de peatones, en el barrio de St. John´s Wood de Londres. Es el lugar que habían elegido para tomar una foto con la que ilustrar el álbum recién grabado en los estudios EMI, localizados a unos metros de allí. Nadie imaginó que ese disco y esa foto fueran a dar la vuelta al mundo hasta convertirse en un icono de la cultura pop. La idea era que los cuatro cruzaran la calle mirando al frente y a un paso coordinado.
En realidad, el fotógrafo escocés Ian McMillan, que se había subido a una escalera plegable, no tenía mucho tiempo para tomar la instantánea. Un agente iba a desviar el tráfico como mucho durante 10 minutos. En la foto elegida para la portada, Paul iba descalzo, pero en otras tantas tomas que después circularon llevaba unas sandalias puestas, el grupo cruzaba la calle en dirección contraria, todos miraban al suelo o no mantenían esa misma distancia entre ellos.
Tras el lanzamiento del álbum en 1969, muchos fanáticos de los cuatro músicos empezaron a creer que Paul McCartney había muerto tres años antes en un accidente de coche y que lo había reemplazado William Shears Campbell, un hombre que supuestamente ganó un concurso gracias a su gran parecido con Paul. Lo que es incomprensible es cómo muchas de esas personas mantuvieron viva tanto tiempo esa teoría. Después de sacar a la luz el disco Abbey Road, McCartney escribió e interpretó canciones tan famosas como Let it be, Blackbird o Golden Slumbers y siguió ofreciendo conciertos y lanzando discos en solitario en una brillantísima carrera.
Esos fanáticos llegaron a afirmar que los pies descalzos eran una señal de su muerte y que sus compañeros le acompañaban como en un cortejo fúnebre. Lennon vestido de blanco era el sacerdote, Starr con traje negro representaba el luto y, por último, Harrison con pantalón vaquero y camisa azul del mismo tejido tenía la función del sepulturero.
A todos los detalles que aparecen en la portada del disco se les sacó punta, como sucedió con los coches aparcados en la calle. Del vehículo negro de la policía se quiso hacer creer que hacía referencia al supuesto accidente en el que Paul había fallecido en 1966. En cuanto al Volkswagen Beetle de color blanco con matrícula LMW-28IF, se decía que hacían referencia a su primera esposa Linda McCartney, por la “L” y por la “M” y que la “W” significaba weeps (llora en inglés) o widow (viuda en inglés). Aunque lo que no se conseguía enlazar con nada era el resto de la matrícula.
La leyenda cogió tal fuerza que hasta el propio McCartney tituló uno de los álbumes que lanzó en solitario en 1993 con el nombre Paul is alive, que significa Paul está vivo. La portada la ilustró con una foto haciendo equilibrio en el paso de peatones de la misma calle junto a un perro, el nieto de su anterior perra ovejera que se llamaba Martha.
Incluso muchos años después, en 2018, aprovechando la presentación de otro de sus trabajos en solitario, el disco Egypt Station, contó a través de su cuenta de Instagram que la foto del álbum de Abbey Road como muchos fans querían dar a entender. Reconoció que tan solo se había quitado las sandalias porque ese día en Londres hacía calor y prefería ir descalzo. El cantante aseguró riendo que: “Cuando crucé Abbey Road no había ningún significado especial”.
Tan solo sus pies desnudos eran un contrapunto para el traje que vestía del sastre británico Tommy Nutter y chocaban con el calzado del resto del grupo. De este modo quiso zanjar las teorías de su supuesto entierro mientras contestaba a las preguntas de sus seguidores sobre Egypt Station a través de la red social.