José Antonio Ruiz lo dejó todo para construir una escuela en El Congo: "El momento de hacer las cosas bien es ahora"
"Si no erradicamos el coronavirus en África, habrá un foco de propagación latente con terribles consecuencias"
"El coronavirus nos muestra que no podemos dar nada por sentado"
Cuatro emite hoy en prime time (22:55h) la tercera entrega de 'Mzungu: Operación Congo'
"Lo que no se da, se pierde", cuenta un dicho popular. Algo parecido debió pensar José Antonio Ruiz cuando, con poco más de 30 años, sufrió en la Antártida un accidente por el que estuvo a punto de perder la vida. O de ganarla, porque fue a raíz de esa situación cuando decidió cambiar el paso para hacer lo que soñaba: cambiar la vida de los más vulnerables a través de la educación, aunque el objetivo implicara vivir en un país en guerra. Así comenzó el proyecto de crear una escuela en África. La experiencia podemos verla en Cuatro en 'Mzungu: Operación Congo’, una aventura solidaria especialmente oportuna en estos días. Uppers ha hablado con su protagonista.
Acabas de estrenar 'Mzungu: Operación Congo’, ¿cómo ha sido tu experiencia durante el rodaje de la serie?
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Dura, muy dura. Tratar de dejar un legado tangible de esperanza para los más desfavorecidos en un lugar tan difícil, en unas condiciones lejos de las deseables y con escasos recursos, fue un reto titánico. En muchas ocasiones, el mejor momento del día era el de ir a dormir, pero a las cinco de la mañana, cuando abría los ojos, lo primero que pensaba era: "¿Qué será hoy?". Y me preparaba para lo peor porque todos los días, sin excepción, surgía un problema inesperado que venía a complicar las cosas un poco más si cabía. Fue todo un ejercicio de determinación llevado al extremo.
También hubo momentos muy buenos. Hubo de todo. Me llevo recuerdos que siempre me harán sonreír y otros que me duelen tanto que me impulsan a seguir adelante. En aquel momento yo no sabía si las imágenes las llegaría a ver alguien algún día, pero el proyecto merecía la pena, cada día del mismo. Tengo que decir también que David y Sergio, los dos operadores de cámara que me acompañaron, no solo hicieron un trabajo increíble, sino que aguantaron todo lo que tuvimos que enfrentar durante los casi cuatro meses que duró el rodaje, que fue mucho.
Has tenido que llevar tu proyecto en condiciones muy duras. ¿Qué enseñanzas puedes aplicar en estos momentos de tu experiencia africana?
África te enseña mucho, pero destacaría el hecho de que, cuando las situaciones se vuelven realmente adversas, cuando las cosas se ponen muy mal, y aunque se cuente con muy pocos recursos, si nos unimos todos somos capaces de cualquier cosa. Estamos viviendo momentos complejos y excepcionales, pero juntos saldremos, sin lugar a dudas.
Después de una pandemia como esta, ¿cómo crees que nos va a cambiar la vida?
Sin pretender ser un gurú, yo creo que los cambios van a ser muchos. Habrá un antes y un después palpable. Por poner ejemplos cotidianos, saber que en cualquier momento puede ocurrir algo de unas características tan devastadoras nos puede llevar a ser más precavidos en diversos aspectos. Habrá personas que tratarán de tener la despensa siempre bien surtida o serán más proclives a ahorrar más si pueden por si pasa algo, las decisiones que tomemos podrán venir determinadas a veces por un "hagámoslo ahora que lo mismo mañana…". En otros temas, creo que haremos más uso del teletrabajo, la tecnología y la ciencia traerán diferentes y nuevas formas de hacer las cosas y de control... En fin, se me vienen a la cabeza tantas cosas que mejor paro. No obstante, también creo que la duración de esta crisis va a determinar mucho tales cambios.
¿Vamos a seguir abrazando y saludando sin miedo? ¿Llevar siempre mascarilla será la nueva normalidad?
Algún día abrazaremos y saludaremos sin miedo, no me cabe duda, pero creo que va a pasar un tiempo hasta que eso ocurra, y de eso tampoco me cabe duda. En cuanto a salir a la calle con mascarilla, cuando todo esto haya quedado atrás, es probable que algunas personas la sigan llevando. Además, aparte de para evitar contagios, también está presente la contaminación que ya de por sí supone una razón para llevarla y que irá en aumento si no le ponemos remedio.
El coronavirus ha llegado a África. ¿Qué supone la llegada de un virus así en países desprovistos de una red sanitaria, medicamentos...?
Es un hecho que, a medida que hablamos, la pandemia se va extendiendo por el continente africano. Como a otros lugares en los que los recursos son muy inferiores a los del mundo más desarrollado, a muchos países africanos tenemos que ayudarlos a contener el virus porque si a nosotros nos cuesta combatirlo, imaginaos a ellos. Además, si no se erradica allí, habrá un foco latente de propagación que no solo afectaría a esa parte del planeta sino a todas, con las tristes consecuencias que estamos viendo que tiene.
Yo creo que la expansión de un virus así en países con bajos recursos no viene sino a agravar enormemente los problemas que ya tenían. En el caso del este del Congo -donde se desarrolla el programa-, por ejemplo, en este instante también están combatiendo una epidemia de Ébola y otra de sarampión que están matando a miles de personas. Terrible. Por otro lado, hablamos de lugares donde el confinamiento es más difícil, ya que muchos de sus habitantes viven de la economía sumergida y tienen que salir a la calle para comer y otros tantos no tienen ni vivienda. Si a eso le sumamos una red sanitaria deficiente… Tenemos que ayudarles.
¿Qué te está enseñando la cuarentena?
La estoy viviendo, como la gran mayoría de los ciudadanos, en casa. Trabajando en ayudar en lo que puedo y tomándomelo muy en serio porque todos tenemos que poner de nuestra parte. Si con la que nos está cayendo alguien no se lo tomara en serio y refiriéndose a la situación me dijera: "Ay, bueno, es que... la próxima vez lo haré mejor...", yo le respondería: "¿De qué próxima vez me hablas? El momento de hacer las cosas bien es ahora".
Esta situación me está reforzando el pensamiento de que no podemos dar nada por sentado y de que hay personas fantásticas allá donde mires. Me parecen admirables los que están dándolo todo tanto en el ámbito sanitario como en otros para paliar como pueden el sufrimiento de muchas personas en medio de todo esto. ¡Gracias a todos!
¿Qué es lo primero que quieres hacer cuando la superemos?
Mi primer o primerísimo plan para después de la cuarentena es, cuando se pueda, abrazar a mi familia y decirles en persona que les quiero con locura y, por supuesto, seguir ayudando. ¡Mucho ánimo a todos!