Cada vez más personas se decantan por los videojuegos como opción de ocio. El año pasado se alcanzó la cifra récord de 18 millones de videojugadores, de los cuales el 52% son hombres y el 48% son mujeres, según el Anuario de la Industria del Videojuego en España 2021.Y, ojo, que los jugadores sénior representan de manera creciente una porción cada vez mayor de esta industria del entretenimiento. No en vano los videojuegos reportan beneficios potenciales para la salud de los adultos mayores, según informa la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).
Dos de cada tres mujeres internautas españolas han jugado a algún videojuego, según el Global Quick View de Kanter. Este estudio sitúa a las mujeres de nuestro país a la cabeza del ranking de los principales países europeos. Ocho de cada diez mujeres que juegan a videojuegos lo hacen a través del smartphone, seguido a mucha distancia del ordenador (45%) y la videoconsola (37 %). La predilección por el teléfono móvil en esta forma de entretenimiento se debe a una una simple cuestión logística, ya que su uso es muy sencillo.
"El juego en el teléfono requiere muy poco esfuerzo logístico y se adapta a diferentes contextos. Quizá por eso es el dispositivo más habitual para jugar", opina Andrea Rosales, profesora de Estudios de Ciencias de la Información y de la Comunicación de la UOC. La experta apunta a la forzada digitalización durante la pandemia como causa principal del aumento de videojugadores en los últimos meses.
Para buscar las razones que explican el aumento de usuarias de videojuegos habría que mirar a los contenidos. Los desarrolladores cada vez los crean más enfocados a sus preferencias: historias de aventuras y superación, y narrativas con espacio para temas familiares y de amistad. Teresa Vidal, profesora colaboradora del máster universitario de Diseño y Programación de Videojuegos de la UOC, cree que a las mujeres les repelen "los protagonistas con rasgos exagerados, con pechos grandes o traseros desproporcionados... En definitiva, todos aquellos elementos en los que sea posible apreciar connotaciones sexuales, dado que no es el objetivo del juego".
Lo que no es tan sencillo es establecer un perfil estándar de consumidor de videojuegos, ya que, aunque "en principio, es evidente que existe una clara relación, el tema es demasiado amplio como para poder definir un perfil concreto de hombres, mujeres, adolescentes y mayores, puesto que hay muchos géneros de videojuegos y muchas variantes que tener en cuenta", asevera la experta.
En cuanto al público sénior, su incremento bien puede explicarse en que los periodos de confinamiento de la pandemia del Covid-19 les ha 'obligado' a familiarizarse poco a poco con los dispositivos digitales. Los avances en la tecnología de la salud también han permitido a los mayores disponer de más tiempo en su día a día. Dado que Candy Crash es una de las aplicaciones que más éxito tiene como juego para teléfonos móviles, "este se ha convertido en una de las opciones preferidas por los mayores", explica Andrea Rosales.
Más allá del tipo de juego mayoritario en esta franja de edad, investigaciones recientes ponen de manifiesto que el consumo de videojuegos podría ayudar a envejecer con salud. Vidal cree que son los juegos de memoria los que están atrayendo a gran parte del público mayor de 65 años. Según Healthline, las nuevas investigaciones sugieren que los juegos pueden ayudar a detectar los signos de deterioro cognitivo o a retrasar su aparición. La práctica de los videojuegos se traduce en un buen ejercicio de gimnasia mental para los adultos mayores.