Barras, terrazas y mesas: así prepararan los bares sus espacios para el mundo pospandemia

España. Tierra de bares, restaurantes, sol y playa. No hay nada que nos guste más que tomar una cerveza bien fresquita en un bar, que degustar un buen plato en un buen restaurantes. Somos hedonistas, disfrutones, vividores del día a día. ¿Pero cómo será ir a un bar o a un restaurante una vez superemos esta pandemia? La Asociación Hostelería de Madrid ha preparado una guía de recomendaciones para preparar a los bares y restaurantes para su reapertura.

Los empresarios deberán realizar una limpieza y desinfección exhaustiva del local para garantizar la idoneidad de las instalaciones antes de la apertura. No tienen por qué abrir con la misma oferta gastronómica ni en todo el rango horario, así que puede que tu plato favorito deje de existir por culpa del coronavirus.

Es posible, además, que veas nueva cartelería por el local indicando recomendaciones sanitarias tanto para ti como para el personal que trabaja en el local.

En la sala de un restaurante ya nada volverá a ser como antes. Según recoge esta guía "se deberá reestructurar la disposición de las mesas en la sala con el fin de respetar el régimen de distancias entre ellas que deberá ser de 1,5 metros".

Además se colocarán geles de hidroalcohol en la entrada del local, a la salida de los aseos, se realizarán desinfecciones periódicas aprovechando los momentos de menos afluencia tanto en tiradores, picaportes, zonas de paso, mesas, sillas, combos de aceite, servilleteros, etc. y se ventilará después de cada servicio.

En cuanto a nuestra costumbre de caña y pincho en la barra también habrá cambios. Para empezar, puede que haya menos personal atendiendo "si esta no tiene un tamaño que permita la separación entre trabajadores". En estos casos, "se valorará si se mantiene el servicio en mesa o se pide al cliente que recoja el pedido en la barra, para evitar el acercamiento entre personal y clientes".

Habrá más limpieza que nunca, con desinfecciones frecuentes de la barra y zonas de apoyo será fundamental, así como los utensilios de uso (pinzas de hielo, etc.) y la vajilla, cristalería y cubertería se desinfectará en el lavavajillas, nunca de forma manual.

Según esta guía orientativa, "las terrazas deberán redistribuirse para garantizar la seguridad del cliente bien separando físicamente las mesas o colocando elementos de protección".

Además del cambio de mesas, se desinfectarán mesas y sillas de manera frecuente, habrá gel desinfectante para los clientes y se evitará la colocación de servilleteros u otros elementos que sean focos de contaminación. "Al final de cada turno se fregará el suelo de la terraza con desinfectante", recomienda la guía.

No solo cambiarán los protocolos para los clientes de los restaurantes y bares. En la trastienda también habrá modificaciones importantes.

Los trabajadores tendrán prohibido "salir a la calle con el uniforme y calzado de trabajo, por lo tanto, no podrán hacerse salidas para fumar, compras de última hora o imprevistos".

Se respetará en todo momento la distancia de 1,5 metros entre trabajadores, se realizará una limpieza y desinfección diaria de taquillas, uniformes, se prohibirá el uso del móvil y efectos personales por motivos de contaminación, se fomentará el constante lavado de manos y el uso de gel hidroalcohólico tras cada tarea.

En las cocinas, la guía creada por Hostelería de Madrid indica que los flujos de trabajo deberán estar muy segmentados y organizados y, "si es posible, se delimitarán los espacios de trabajo con cinta adhesiva de seguridad".

Los cocineros deberán llevar colocados equipos de protección individual (EPI) y el lavado de manos constante es obligatorio independientemente del uso de guantes, que deberán cambiarse para cada actividad. También habrá más limpieza en zonas sensibles de paso (zonas de paso, picaportes, etc.) y se incrementará la frecuencia de la desinfección.

En la España de antes de la pandemia de coronavirus había abiertos unos 181.000 bares y más de 80.000 restaurantes, que generaban siete millones de empleos directos directos e indirectos y suponen el 6,2% del PIB español. Somos un país con alta dependencia del sector de la restauración, por lo que la vuelta a la "nueva normalidad" preocupa, y mucho.

Desde el departamento de Calidad y Seguridad Alimentaria de Hostelería Madrid han comunicado tanto a la Comunidad de Madrid como al Ayuntamiento de Madrid este protocolo emanado del sector privado para que sea tenido en cuenta a la hora de hacer el definitivo por parte de las autoridades sanitarias.