Las pesetas que tenemos por casa ya no podrán ser convertidas en euros porque el plazo del Banco de España para canjearlas acabó el año pasado. No obstante, esas monedas y billetes que se nos pueden haber quedado en el fondo de cualquier cajón y que encontramos cuando nos da por poner orden en ellos puede que nos den un ingreso extra. Algunas de esas monedas han llegado a alcanzar pujas de más de 30.000 euros en algunas subastas, pero ¿qué hay de los billetes? Pues atento, que algunos pueden hacer algo más que resolverte las navidades.
A pesar de que hoy no puedas pagar con pesetas, hay ciertos billetes que por algunas peculiaridades tienen un gran valor y coleccionistas pagan altas cantidades por incluirlos en sus colecciones.
Uno de esos es, por ejemplo, un billete de mil pesetas que comenzó a circular en verano de 1892. ¿Por qué suscita tanto interés? Precisamente por la escasez de ejemplares que hay de este billete, lo que lo convierte en uno de los más codiciados y que, según expertos, puede llegar a alcanzar los 30.000 euros en subastas.
Obviamente no es el único billete de las antiguas pesetas que está valorado en precios desorbitados. Otro billete de mil pesetas empezó a distribuirse en marzo de 1885 con normalidad, pero tiene algo que lo hace especial, ya que realmente el billete pertenecía a 1886, una curiosidad que hace que los coleccionistas pongan el ojo sobre él. A ello se le suma algo más, y es que en él está impreso un busto de Goya, algo que le da aún más valor y hace que pueda alcanzar de 15.000 a 20.000 euros en una subasta.
Quizá lo que sí que tengas por casa sean monedas. Algunas pesetas de cinco duros están muy bien valoradas en el mercado de la numismática, especialmente los de 1949. Los duros acuñados ese año pueden llegar a tener un precio muy alto en las subastas, pudiendo oscilar su valor entre los 12.000 y los 36.000 euros.
No obstante, no todas valen lo mismo, todo dependerá de su estado de conservación y los números que estén dentro de las estrellas que están alrededor de la palabra ‘Cinco’. Por ejemplo, la que tiene la combinación 19 51 puede costar de 3.000 a 6.000 euros. Sin embargo, la que más puede darte es la que marca 19 52, de la que se tiene constancia de muy poco ejemplares y, aunque su puja más habitual está sobre los 20.000 euros, en 2011 se llegaron a pagar 36.000.