Europa pone fin a que te cobren por el equipaje de mano: ¿qué hacer si aún te obligan a pagar?

Cada vez más, especialmente en viajes de pocos días, se evita el facturar maleta en el aeropuerto. Poder llevar tu maleta de mano en la cabina del avión es más cómodo: evitas la cola en facturación y, una vez te bajas del avión, no tienes que hacer la eterna espera hasta que tu maleta aparece por la cinta. El problema es que algunas aerolíneas cobran por esa maleta que no cabe bajo el asiento delantero y debe ir en el compartimento superior, algo con lo que Europa quiere acabar.

La Comisión de Peticiones (PETI) del Parlamento Europeo acaba de aprobar unánimemente la resolución en la que piden a la Comisión Europea y a los países que aplique una sentencia que da al equipaje de mano la categoría de ‘elemento indispensable’, logrando así impedir a las aerolíneas cobrar un extra a los pasajeros que lleven maletas pequeñas.

El propio Tribunal de Justicia de la UE se ha pronunciado señalando que el equipaje de mano es indispensable y no se puede cobrar un suplemento, siempre que no exceda el peso exigido ni las dimensiones establecidas. Precisamente el ministerio de Consumo abrió un expediente sancionador en agosto a varias aerolíneas (Ryanair, Vueling, Easyjet y Volotea) por cobrar el equipaje de mano al incumplir la Ley de Navegación Aérea.

"Los usuarios están amparados por la Ley de Navegación Aérea, por la que con el precio del billete se incluye el equipaje de mano de hasta 10 kg, así como los objetos que el viajero lleve consigo, incluidos los artículos adquiridos en las tiendas situadas en los aeropuertos y solo podrá denegarse el embarque de estos objetos y bultos por razones de seguridad, vinculadas al peso o al tamaño del objeto y que, en este caso, sí deberán facturarse con los costes establecidos por la compañía", señala una sentencia.

Pero ¿qué puedes hacer si a la hora de embarcar te obligan a pagar un suplemento? Para subir al avión no quedará otra que pagar, pero nada más aterrizar podrás poner tu reclamación amparado en un fallo que sentó jurisprudencia en 2014 publicado por el Tribunal Superior de Justicia Europeo.

Lo primero es hacer la reclamación al correo electrónico de la aerolínea en la que has viajado y te ha cobrado por tu equipaje de mano, adjuntado tu tarjeta de embarque, billetes, reserva y cualquier documento que pueda servir, o incluso en el mismo aeropuerto, en el mostrador de la aerolínea.

Puede que salga bien, pero también mal y se nieguen a devolverte el dinero, por lo que tendrás que ir por la vía judicial y, aunque te parezca que no merece la pena por los gastos que puede suponer denunciar esta situación, al tratarse de una reclamación de menos de 2.000 euros no vas a necesitar contratar a ningún abogado, solo preocuparte de presentar la demanda ante el juzgado.

Lo más lógico es que ni siquiera se celebre un juicio, a no ser que la compañía alegue, por ejemplo, que no viajaste, sino que el mismo juzgado, con el precedente ya marcado, resuelva la demanda a tu favor obligando a la aerolínea a devolverte el dinero.