La moneda de 1 euro que podrías vender por casi 3.000
Muchos coleccionistas pagan miles de euros por ciertos ejemplares que cumplen con determinadas características
Un euro acuñado en 1999 del que se tiraron pocas unidades se vende por un valor de 2.990 euros en una web de compraventa
La moneda más buscada en España vale dos millones de euros
Las monedas antiguas son tesoros muy buscados por los coleccionistas, y sin embargo muchas personas las pueden tener por casa, heredadas de sus padres y abuelos, sin darle ninguna importancia y sin ser conscientes de su valor. Sin embargo, también hay monedas actuales, como el euro, que también pueden cotizar bastante alto en el mundo de la numismática.
MÁS
Por lo general, lo que le da un plus añadido a una pieza es su exclusividad, su baja tirada de ejemplares o un error de acuñación. En este caso nos referimos a una moneda de un euro específica que se vende por un valor de 2.990 euros en eBay. ¿A qué viene este precio tan elevado por una pieza tan moderna?
Back in 1999
Habría que recordar que fue en 1999 cuando comenzaron a acuñarse los primeros euros, que estuvieron en circulación durante años para que los ciudadanos se acostumbraran a su uso. La moneda de la que hablamos es precisamente de ese año. Se trata de un ejemplar del que se tiraron pocas unidades, dado que por aquel entonces su uso era residual hasta que se llevara a cabo la adaptación completa.
Por su cara delantera esta pieza en una moneda de 1 euro normal y corriente. Su símbolo y sus colores dorado y plata hacen que parezca una enseña como otra cualquiera. Sin embargo, es su cara trasera la que eleva el valor y la convierte en algo especial.
En su reverso esta moneda recoge el lema de Francia, Liberté, Egalité, Fraternité, junto a las siglas de la república francesa (RF) y un árbol del que emanan múltiples ramas y hojas. El detalle que lo convierte en un ejemplar muy codiciado en el mundo de la numismática es precisamente el año de acuñación: ese 1999 de la parte inferior.
El valor de los duros
Por supuesto, hay muchas otras monedas que alcanzan en el mercado un valor muy superior al nominal. Por ejemplo, las monedas de cinco pesetas, también conocidas como duros, aún se pueden encontrar fácilmente en los cajones de miles de españoles -se estima que quedaron 266.051 millones de estas monedas sin cambiar- y pueden cotizar muy alto en el mercado.
Al convertirse en una moneda fuera de circulación, las pesetas empezaron a tener un gran valor entre aficionados e inversores numismáticos. Especialmente ciertos ejemplares que cumplen con algunas características. En primer lugar, su grado de conservación debe ser excepcional y casi perfecto. Pero incluso si tienen algún error de acuñación puede ser más valiosa.