Adiós a la tarjeta de coordenadas y otros cambios en tu banca electrónica a partir del 14 de septiembre
Tener un smartphone y en algunos casos la app de tu banco será necesario aunque hagas las operaciones desde el ordenador
La directiva PSD2 supone el fin de las tarjetas de coordenadas
Probablemente tu banco ya te ha avisado, ha saltado una notificación en tu móvil o te ha llegado una carta a casa. La banca electrónica cambia y lo hace a partir del próximo 14 de septiembre. Si no has abierto el mensaje o no has sacado el tiempo suficiente para leerlo con atención, no te preocupes.
Sabemos que estás acostumbrado a hacer transacciones por internet, según un estudio de 40 db para Uppers, el 93,1% de los españoles mayores de 45 años compraron online al menos una vez durante el último año y el 84,7% tiene un smartphone. Para que no te pille por sorpresa y puedas seguir haciéndolo, te damos las claves de este cambio de normativa que supondrá una mejora en tu seguridad en línea.
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Hasta ahora, para acceder a tus cuentas mediante tu ordenador o tu móvil, era suficiente con un usuario y una contraseña, pero a partir de ahora la cosa cambia. Tener un smarthphone y en algunos casos la aplicación de tu banco descargada será imprescindible para que realizar cualquier operación.
Para reducir las probabilidades de fraude, la directiva PSD2 obligará a los usuarios una doble autenticación. Es decir, que además de la contraseña pedirá además algo que forme parte del usuario como la huella dactilar o la cara, gracias al reconocimiento facial, y algo que tenga el usuario en su posesión como un móvil o una tarjeta.
La mayoría de bancos optan por un código SMS temporal
El Banco Santander y Openbank optan por una clave de acceso más un código SMS que llegará al móvil registrado en el contrato de banca digital en el momento de la autentificación. Es el mismo sistema por el que ha optado el BBVA, cuyos clientes ya han sido informados de que tendrán la obligación de tener el móvil a mano aunque hagan las operaciones desde el ordenador.
Los bancos que seguían utilizando las tarjetas de coordenadas, como Laboral Kutxa o ING, aprovecharán la puesta en marcha de la normativa para eliminarlas. Y las cajas rurales han optado por combinar el NIF y contraseña, huella o reconocimiento facial con código que mandarán al móvil en el momento de la operación.
Sin embargo ING va aún más lejos. Este banco mandará las claves a través de notificaciones a través de la aplicación. Es decir, que para realizar cualquier operación aun desde el móvil es fundamental tener un Smartphone con un sistema operativo que soporte la app y tenerla descargada y operativa. Targobank también sigue sus pasos y pide a sus clientes los mismos requisitos.
No obstante, según el reglamento que estipula estas medidas de seguridad extra, solo será necesario este segundo factor de seguridad la primera vez que se acceda a la banca online a partir del 14 de septiembre y una vez cada 90 días.
La entrada en vigor puede demorarse
Este sistema, que afecta tanto al comercio electrónico como a la banca electrónica, entrará en vigor oficialmente el próximo 14 de septiembre. Sin embargo la Autoridad Bancaria Europea emitió un dictamen el pasado mes de junio en el que reconocía el gran desafío que suponía el cambio.
Por lo tanto, la EBA acepta que los organismos estatales que lo consideren necesario pueden otorgar una prórroga para que las compañías y entidades se adapten al cambio. EN algunos casos dicha prórroga podrá alcanzar incluso los 36 meses. En nuestro país, el Banco de España está dispuesto a prorrogar 14 meses la implementación de la normativa e incluso a dar cuatro meses más de transición.