El ahorro. Es uno de los mayores quebraderos de cabeza en los hogares. Casi todos llegamos a sufrir sus consecuencias para bien o para mal. En estos casos, cada maestrillo tiene su librillo. Y el que no cuente con un buen, no ha de preocuparse: siempre habrá algún experto que proponga una práctica para poner en orden ingresos y gastos. El que funcione o no, depende de cada individuo y su estilo de vida; hay quien es más propenso al despilfarro.
Una de esas fórmulas es la Fórmula Greene, diseñada por la economista Kimmie Greene, que un día sintió la necesidad de resolver esa preocupación común a todos los mortales. Contempla básicamente dos variables: la edad del trabajador y el sueldo que recibe anualmente. Y fija una serie de objetivos a cumplir cada cinco años. La pregunta que plantea esta técnica es una que nos hacemos todos tarde o temprano: ¿he ahorrado el suficiente dinero para la edad que tengo? Es flexible y también tiene en cuenta que los ingresos, en algunas etapas de nuestra vida, no siempre son los esperados. Compruébalo en el vídeo.
¿Qué ocurre cuando uno desea acogerse a una jubilación anticipada? Es justo en esta parte del proceso donde pueden surgir los problemas para lograr los niveles de ahorro marcados. En estos casos, Greene sugiere tomar medidas drásticas en etapas tempranas que puedan afectar en el futuro. Retrasar la idea de formar una familia, renunciar al ocio o a los viajes o trasladarse a una residencia más económica son algunas de las recomendaciones de esta analista financiera norteamericana.