En España se roban casi 300.000 teléfonos móviles al año. O lo que es lo mismo, unos 30 dispositivos cada hora. Se trata de un ‘interesante negocio’ para los carteristas y rateros de toda la vida, que los venden a precios de risa en comparación con lo que costaron nuevos a sus dueños. Pero el hurto de móviles se está convirtiendo en la gallina de los huevos de oro para los grupos de hackers organizados.
El verdadero problema viene si el que te ha robado el móvil es, además de un carterista, un ciberdelincuente. Si es así, podría hacerte víctima del SIM swapping, la técnica que usan últimamente los hackers que se basa en duplicar la tarjeta SIM del móvil de sus víctimas. Así, pueden acceder a toda su información personal y, sobre todo, pueden usarlas en la verificación por medio del móvil que suelen pedir todos los bancos cuando se opera a través de Internet.
Por ello, aunque la mayoría de las apps de los bancos son muy seguras, con protocolos complejos para las claves de acceso, cifrado de las comunicaciones y teclados virtuales, los timadores digitales son capaces de saltarse la seguridad por medio de una técnica llamada “ingeniería social”, que consiste en el engaño a través de técnicas de persuasión y manipulación psicológica.
Sin embargo, en lugar de timar directamente a las víctimas, el SIM swapping se consigue por medio de un engaño a los dependientes de las tiendas de telefonía. Así, los hackers hacen que los vendedores de las operadoras de móviles les transfieran los números de teléfono a tarjetas controladas por ellos por medio de un duplicado de la SIM.
Por lo general, los operadores de telefonía piden en todos los casos que los usuarios vayan a tiendas oficiales físicamente y que éstas piden datos personales para autorizar el duplicado de la tarjeta. Sin embargo, los errores humanos son posibles.
En una hora o dos, la mayoría de víctimas se da cuenta de una de estas señales, por lo que los "fraudsters" tienen que darse prisa para transferir el dinero a cuentas mula y eliminar su rastro.
Si descubres que has sido víctima del timo de duplicado de SIM, debes alertar a tu banco y reclamar que te devuelvan los cargos no autorizados, aportando la denuncia a la policía que habrás tramitado previamente.
La normativa aplicable en este tipo de situaciones establece que, en aquellos casos en los que se ejecute una operación de pago no autorizada, la entidad ordenante está obligada a devolver el importe de la transacción al instante. El banco únicamente podrá negarse si puede acreditar que se ha actuado fraudulentamente de una manera deliberada o ha habido alguna negligencia.
Como hemos dicho, cualquiera puede ser víctima de este peligroso fraude relacionado con las tarjetas SIM. Sin embargo, hay varias prácticas que puedes tener en cuenta a la hora de protegerte del SIM-swapping: