El pueblo a una hora de Madrid que ofrece casa gratis, comida y sueldo

En un rincón casi olvidado de la provincia de Guadalajara, a apenas una hora de Madrid, se encuentra Almadrones, un pequeño pueblo que ha lanzado una oferta difícil de rechazar para quienes buscan un cambio en su vida. En un intento por combatir la despoblación y revitalizar su comunidad, este municipio ha ofrecido a sus nuevos residentes no solo un empleo, sino también una casa gratuita, comida y un sueldo mensual de 1.600 euros. Esta propuesta está dirigida principalmente a aquellos interesados en trabajar en el sector de la hostelería, en puestos como camareros, ayudantes de cocina y cajeros.

Almadrones, como muchos pueblos de la España rural, ha sufrido un grave declive poblacional en las últimas décadas. Con una población actual de 54 habitantes, el pueblo busca atraer a nuevos residentes que contribuyan a reactivar su vida social y económica. Esta es una estrategia que han comenzado a adoptar distintos municipios de la España vacía, en los que el envejecimiento de la población y la falta de oportunidades laborales han llevado a un éxodo hacia las ciudades.

La oferta que propone Almadrones no es solo una oportunidad laboral, sino una invitación a formar parte de una comunidad en la que la tranquilidad, el contacto con la naturaleza y la calidad de vida se presentan como un contrapunto al estrés de la vida urbana. A diferencia de las grandes ciudades, donde los altos costes de la vivienda y los bajos salarios en muchos sectores se han convertido en una realidad cotidiana, en Almadrones los nuevos habitantes tendrán acceso a un alojamiento gratuito, lo que supone una ayuda muy a tener en cuenta en los tiempos que corren.

El Grupo Rebollo, una empresa dedicada a la restauración, es quien está detrás de esta atractiva oferta laboral. Actualmente, busca cubrir varias posiciones en su restaurante ubicado en el pueblo, ofreciendo un salario mensual de 1.600 euros junto con vivienda y manutención gratuita. Los puestos incluyen camareros y ayudantes de cocina, con la posibilidad de acceder a un contrato indefinido y jornadas completas con turnos rotativos.

La experiencia en el sector de la hostelería es valorada, pero no es un requisito excluyente. La empresa está interesada en candidatos con buena predisposición y ganas de aprender, lo que abre la puerta a una mayor diversidad de interesados. Este enfoque es parte de una tendencia más amplia en la que muchas empresas del sector rural buscan empleados que no solo aporten sus habilidades laborales, sino también supongan un compromiso con la comunidad local.

La oferta de Almadrones no es única en su género. En los últimos años son varios los pueblos de España que han lanzado iniciativas similares con el objetivo de frenar la despoblación. Hontanar, en Toledo, por ejemplo, también ofrece una casa gratuita a quienes estén dispuestos a gestionar el bar del pueblo, cubriendo incluso parte de los gastos operativos. Portell, en Castellón, también ofrece trabajo y una casa de alquiler por tan solo 50 euros, contando además el ayuntamiento con capacidad para ofrecer 7 trabajos y 3 viviendas.

Estas iniciativas reflejan un problema estructural en muchas zonas rurales de Europa, donde la falta de oportunidades laborales y los servicios limitados han llevado a una migración masiva hacia las ciudades.

Mudarse a un pueblo como Almadrones no es solo un cambio de entorno laboral, sino una transformación completa del estilo de vida. Situado en la provincia de Guadalajara, en una región con vastos paisajes naturales, el pueblo es lo opuesto a lo que sería la vida en Madrid. A pesar de su pequeña población, la cercanía a la capital hace que la oferta resulte atractiva para quienes deseen un equilibrio entre la paz rural y el acceso a las comodidades urbanas.

Almadrones también ofrece oportunidades para el contacto con la naturaleza, con amplios espacios al aire libre y actividades de ocio que giran en torno al entorno natural. Para muchas personas, especialmente después de la pandemia, el trabajo remoto y el deseo de disfrutar de una mejor calidad de vida han impulsado una tendencia hacia la ruralización, y Almadrones ofrece precisamente esa posibilidad.

Para todos aquellos que estén considerando realizar un cambio radical en su vida, esta oferta representa una oportunidad excepcional. No solo se trata de un empleo bien remunerado, sino de una experiencia de vida en un entorno donde los lazos comunitarios y la calidad de vida pueden ofrecer una satisfacción que va más allá de lo económico. Además, el contrato indefinido y la posibilidad de formar parte de una comunidad en crecimiento aseguran estabilidad a largo plazo.