Con la irrupción de la pandemia, el número de trabajadores que se acogieron a un ERTE se incrementó. Por este motivo, este apartado comenzó a adquirir relevancia en el ejercicio fiscal del pasado año. Esta modificación se mantendrá también en la Renta del presente año.
Los trabajadores en ERTE cobran un 70% de su base de cotización durante el periodo que dura la prestación. Esta prestación tributa en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) como rendimiento de trabajo, lo que significa que debe declararlo. Aunque existe casos en los que el contribuyente podría quedar exento. En el vídeo aclaramos algunas de las dudas sobre en ERTE en la Declaración de la Renta.
Este año, además, hay novedades: se incluye una casilla destinada a la tributación de las criptomonedas, las reformas de la vivienda para mejorar la eficiencia energética y los alquileres de inmuebles.