Yolanda Díaz: "No podemos prescindir de los trabajadores de 50 cuando estamos en lo mejor de nuestra profesión"

Es sabido que la pandemia ha agravado el desempleo en los mayores de 50 años. Nuestro país, más allá de las altas cifras de desempleo juvenil en Europa -tiene la más alta del continente-, tiene un problema con el empleo y el aprovechamiento del talento sénior. Según la última Encuesta de Población Activa del INE, solo la mitad de la población entre 55 y 65 años están ocupados. Aprovechar las oportunidades que ofrece la experiencia de los trabajadores en edad de madurez es una tarea pendiente y un reto que hay que acometer más pronto que tarde.

Es una de las reflexiones que ha mantenido Yolanda Díaz, ministra de Trabajo, durante el diálogo social del futuro del envejecimiento organizado por el Foro Económico de Galicia, que tuvo lugar el pasado lunes. Durante la ponencia, la ministra ha planteado la solución a la expulsión sistemática de los trabajadores "mayores" del mercado de trabajo, que en su opinión, debería pasar por un cambio estructural de la cultura empresarial de nuestro país.

"Cuando estamos diciendo que hay ERE que son utilizados por las empresas para llevar adelante un proceso de ajustes, le estamos mandando un mensaje claro a la sociedad española, que a partir de los 50 años no somos talento rentable a una empresa, y todo lo contrario", ha explicado Díaz. En ese sentido, la ministra ha suscrito la necesidad de realizar un "pacto intergeneracional" con las empresas y el conjunto de la sociedad.

Al mismo, Díaz ha enfatizado la necesidad de mantener el talento sénior, en tanto que en su opinión, los 50 años son la mejor etapa profesional de los trabajadores. "No podemos prescindir de los trabajadores y trabajadores cuando en teoría estamos en lo mejor de nuestra profesión, es un desastre", ha explicado la ministra. El quid de la cuestión, según Díaz, es mantener el equilibrio entre la experiencia y la sapiencia de los trabajadores en edad de madurez junto con la energía y manejo de herramientas de las generaciones posteriores.

Más allá de la intención, lo que sí es cierto es que el gobierno español ha aprobado un Real Decreto en el que busca paliar el estancamiento de la contratación de los trabajadores mayores de 45 años, tal y como contamos en Uppers. Se trata de un conjunto de medidas dirigidas a los séniors, especialmente a aquellos que sufren el paro de larga duración, por el que tendrán un acceso preferente tanto a subvenciones públicas para favorecer la contratación como al emprendimiento por cuenta propia.

¿En qué consiste el plan del gobierno? La batería de medidas incluye bonificaciones a las empresas por la contratación de mayores de 45 años y, específicamente, un programa para evitar la discriminación por razón de edad y a aquellas personas que se encuentren en una situación de desempleo de larga duración. En este último punto, las empresas recibirán también subvenciones de 7.000 euros por la realización de contratos indefinidos a los parados de larga duración, en cuya franja más alta se encuentran los mayores de 50 años.

El plan también prevé importantes subvenciones para aquellas personas que decidan emprender por su cuenta, con ayudas directas que podrían llegar hasta los 7.500 euros dependiendo del negocio y la dificultad de inserción según los estándares del SEPE. La formación, por otro lado, será también un punto a tener en cuenta en este programa de ayudas, favoreciendo la actualización de los trabajadores que así lo requieran para así facilitar su integración en los distintos entornos laborales.

Algunos sectores de la vertiente empresarial también parecen conscientes de la necesidad de blindar la contratación de las personas maduras. "Yo soy un defensor acérrimo del talento sénior. Conseguir entornos diversos e intergeneracionales va a dar mucha riqueza a la compañía. Lo que nos ofrece la experiencia es un activo, igual que la serenidad... Ciertos aspectos del talento sénior que no podemos desperdiciar", nos explicó Ángel Sáenz de Cenzano, Country Manager de LinkedIn España, en una entrevista en Uppers, en la que se trataron distintos temas referentes a la situación laboral de los mayores de 50 años.