Los cambios que debes hacer en tu ascensor antes de julio con la nueva ley

La gran mayoría de los edificios de España cuenta con ascensores, especialmente los más nuevos. Sin embargo, muchos de los elevadores que cada día utilizan cientos de propietarios e inquilinos para subir y bajar de su casa cuentan con décadas de uso que podría poner en peligro la seguridad de sus usuarios. Por eso mismo, la nueva normativa de ascensores de España pretende mejorar la seguridad con diferentes medidas y va a entrar en vigor el próximo 1 de julio.

Las comunidades de vecinos deben estar atentas ante el cambio de la normativa que implica que los elevadores cuenten, entre otras cosas, con puertas con cortinillas, sistemas de comunicación bidireccional en cabina, o con modernizadores de contrapeso. En concreto se espera que se actualicen alrededor de 400.000 ascensores en toda España, algunos de ellos tras décadas en funcionamiento.

Tal y como indica el Boletín Oficial del Estado (BOE), la norma sostiene que el presidente de la comunidad de propietarios de cada edificio es quien queda como responsable de que el ascensor cumpla con los requisitos marcados por la nueva norma.

En caso de que la comunidad deba cambiar el ascensor, la comunidad tendrá que presentar una serie de documentos ante su comunidad autónoma, como la ficha técnica de la instalación o el certificado de inspección inicial favorable, entre otros. Sin embargo, aquellos edificios que ya tienen instalado un ascensor que cumple con los requisitos simplemente requieren de una revisión para comprobar sus condiciones de seguridad y buen funcionamiento.

Dependiendo del ascensor y de los cambios que haya que hacer, el cambio puede suponer un gasto desde los 800 euros hasta los 30.000 euros para la comunidad de vecinos. Pese a que las comunidades deben cumplir con la normativa a partir del 1 de julio, si se incumple, se tendrá que solventar en los plazos previstos, dependiendo del cambio que haya que hacer.

Las mejoras que deben presentar los ascensores de los edificios principalmente se basan en aspectos tecnológicos. Entre los más destacados está que se incluyan puertas con cortinillas o sistemas de comunicación bidireccional en la cabina, además de dispositivos que sean capaces de controlar la carga que tiene el ascensor.

Otras medidas de seguridad que deberán integrar los ascensores desde el 1 de julio son la mejora en la nivelación o protecciones para evitar el cierre de las puertas mientras los usuarios entran o salen; además de sistemas de prevención para que la cabina no sufra movimientos inesperados.