Hombres y piel sensible: cómo conseguir el afeitado perfecto sin irritaciones
La piel sensible de los hombres enrojece fácilmente y es propensa a imperfecciones
En casos de pieles muy sensibles es recomendable afeitarse dos o tres veces a la semana
El uso de un buen after shave, hidratante y foto-protector mejora las pieles sensibles
Aunque parezca algo exclusivo de las mujeres, la piel sensible también se da en los hombres. Esta piel se caracteriza por poseer una barrera de protección natural que no funciona de manera correcta. Por ello, la luz solar, la contaminación o los cambios de temperatura le afectan más que a otras pieles. Entre sus manifestaciones: enrojecen con facilidad, tienden a la deshidratación, son más propensas a imperfecciones y son más reactivas. Para redondear la ecuación, los hombres incluyen en su rutina de belleza un ritual de por sí agresivo como es el afeitado. ¿Es, entonces, incompatible tener la piel sensible y afeitarse perfectamente?
Prepararla bien
Lo cierto es que muchos hombres con la piel sensible encuentran verdaderos problemas tras el afeitado. Lo primero que se recomienda en estos casos es prepararla bien con agua templada y un jabón facial lo más natural posible o bien con un Ph neutro que ayude a limpiarla, eliminando de esta manera impurezas y dejándola perfecta para el afeitado: "Lo ideal es afeitarse por la mañana recién levantado, ya que la piel está más descansada y relajada, preferiblemente después de la ducha ya que con el vapor del agua tenemos los poros más abiertos. Después, recomiendo un aceite pre-shave que nos ayude a mantener más tiempo hidratada la piel. También, el bañado de crema con brocha de tejón, ya que con el movimiento circular levantamos los pelos que puedan estar enquistados, y así conseguimos un mejor apurado con menor agresión para la piel", explica César Parra, director del salón de belleza masculina y barbería Homine Madrid.
Olvídate de la navaja
A la hora del afeitado, es mejor dejar la navaja a los profesionales si no se tiene mucha práctica. "La navaja convencional, si se domina como es nuestro caso, es un placer usarla y todo un ritual ya que se trata de afeitado clásico tradicional", asegura Parra.
Sin embargo, lo habitual es que no se sepa manejar. En este caso, es recomendable afeitarse con maquinillas de cuchilla desechable que permitan llegar bien a las zonas más difíciles, como son las cercanas a la nariz. "Se debe afeitar siempre a favor del pelo, y si la piel lo permite, dar otra pasada esta vez lateral o a contrapelo. Si no se tiene mucho vello ni la necesidad de afeitarse todos lo días, lo mejor para las pieles sensibles es afeitarse dos o tres veces a la semana para evitar las agresiones en la piel", afirma este experto.
Alterna agua caliente y fría
Para acabar, es recomendable un baño de contraste, primero con agua caliente y después con agua fría, para cerrar bien el poro y aplicar posteriormente un after shave en bálsamo sin alcohol y con un ligero masaje. "En cuánto a cosméticos para pieles sensibles, lo mejor es elegir aquellos con propiedades calmantes y una buena crema hidratante que nos aleje de la picazón y favorezca la recuperación de la piel y el cierre de los poros". Además, si la hidratante posee factor de protección, mejorarás la condición de la epidermis.
La calidad de la maquinilla importa
No hay afeitado perfecto sin una buena maquinilla. Es mejor utilizar las de más de una hoja o máquinas clásicas con cuchilla intercambiable, de manera que cada vez que realicemos el afeitado podamos cambiar la cuchilla. No se recomiendan para este tipo de piel las de un solo uso, ya que pueden causar lesiones. Si, además, la cuchilla se ha usado más de una vez y no se ha limpiado bien, es una fuente de gérmenes que puede complicar mucho la acción del afeitado.