Adiós a las manchas: los nuevos tratamientos que consiguen borrarlas y revitalizar la piel

Propias del foto-envejecimiento, las manchas son una respuesta de la piel a la sobreexposición solar. Prevenir su aparición es la principal medida terapéutica, pero una vez presentes en la piel, existen tratamientos a medida para eliminarlas. Te contamos cuáles son los más adecuados para cada tipo de mancha.  

Es la tecnología más avanzada para la eliminación de lesiones pigmentadas (léntigos, melasma, nevus). “Es un gran avance. Se trata de un láser seguro y altamente efectivo para tratar las afecciones pigmentarias dérmicas y epidérmicas y también una valiosa herramienta para tratar el melasma cuando no mejora con la terapia tópica”, explica el doctor Ángel Martín, Director Médico de Clínica Menorca.

Está indicado para solucionar problemas de pigmentación no deseada. Los cientos de micro-lentes Focus redistribuyen la energía para tratar la piel de forma segura con energías altas. Se puede utilizar en varias áreas del cuerpo: cara, manos, brazos y escote. La respuesta de la dermis a la acción de la energía del láser lleva a la formación de nuevo colágeno y redensifica las fibras de elastina, por lo que revitaliza la dermis y los resultados se notan a las pocas semanas tras el tratamiento. Según Martín, “comparado con los láseres fraccionados ablativos, con PicoSure se reducen las molestias del tratamiento y el tiempo de recuperación”.

Los tratamientos se deben realizar con un intervalo mínimo de dos meses. La mayoría de lesiones pigmentadas como léntigos y nevus se aclaran en una o dos sesiones y remiten entre seis y 12 meses. Para eliminar el melasma, se necesitan entre cuatro y diez sesiones cada quince días.

El tratamiento está contraindicado en personas con hipersensibilidad a la luz, pacientes que estén tomando medicación fotosensible o terapias con oro, si hay una herida abierta o herpes simple en la zona a tratar y en mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.

Tras el tratamiento puede aparecer enrojecimiento o inflamación. La mayoría son transitorias y se solucionan en una semana. La hipopigmentación como efecto secundario puede ocurrir en cualquier tratamiento con láser, aunque es más común en fototipos oscuros y se puede evitar con protección total. Se recomienda no tomar el sol un mes antes y después del tratamiento.

Se localizan en las zonas sobreexpuestas de dermis fina como las del escote, el dorso de las manos, los antebrazos, hombros y espalda. Se pueden eliminar con el láser Picosure y con Plasmage, un equipo médico de plasma fraccionado que trabaja en la superficie de la piel. La aguja del manípulo emite un potente haz de luz capaz de generar plasma frío que se pasa por encima de la mancha eliminándola generalmente en una sesión.

Son manchas muy frecuentes en verano que aparecen como consecuencia de exponer al sol zonas inflamadas o con alguna lesión en la piel, por ejemplo, tras la depilación, tratamiento con láser, heridas, quemaduras, etc. Son manchas rosas, rojas, pardas o negras, dependiendo del color de la piel. Suelen desaparecer solas o con tratamiento cosmético a base de productos despigmentantes como la hidroquinona, los retinoides o peelings de ácido glicólico.

Pigmentación oscura con capilares dilatados

El Láser vascular elimina manchas profundas en una sola sesión. Está indicado para lesiones vasculares como rosácea, citrocuperosis, angiomas, hemangiomas, telangiectasias o puntos rubí. Este láser lleva incorporado un sistema de frío que hace innecesaria cualquier tipo de anestesia y actúa 'quemando' selectivamente los vasitos que forman dichas lesiones, sin dañar los tejidos adyacentes. El propio cuerpo se encarga de ir eliminando los restos de estas manchas y blanqueando la zona tratada. El número de sesiones requeridas depende de la severidad de la lesión. Se requieren un total de cuatro o seis sesiones separadas por períodos de 20 días.

Producido por la concentración aumentada de la melanina en la piel, siempre empeora con la exposición solar. Aparece especialmente en mujeres y tiene una importante predisposición genética y una estrecha relación con alteraciones del sistema hormonal, como durante y después del embarazo y ocasionalmente, con la menopausia.

Además de Picosure, también podemos utilizar tratamientos con fenol. El procedimiento consiste en limpiar el rostro con un desengrasante y aplicar el fenol eliminando, de forma controlada, las capas de la dermis a nivel medio y profundo hasta la desaparición de las manchas. La piel se descama durante los días posteriores al tratamiento. El tiempo de recuperación es de unos diez días. Se puede realizar en todo tipo de pieles y es indoloro. Sus resultados son espectaculares pues además de eliminar las manchas, reconstruye el colágeno y produce retracción de la piel, por lo que ayuda a mejorar los problemas de flacidez y borra las arrugas superficiales, suavizando las más profundas. Este tratamiento también se puede realizar en todo tipo de pieles y es indoloro.