Son pocos los que en su etapa adolescente no vivieron en sus pieles el drama del acné. Esos granitos que aparecían en plena pubertad y que eran un verdadero quebradero de cabeza hasta que lograbas que desapareciera. Incluso puede que, si tienes hijos, lo hayas vivido desde el otro lado de la barrera, viendo como da igual que pasen las décadas, que algunos problemas no cambian. Sin embargo, mientras que algunos solo sufrían granitos puntuales, otros vivieron la pubertad en todo su esplendor y hoy, décadas después, siguen conviviendo con las marcas que el acné dejó en su rostro.
Habrá quien ya se haya acostumbrado a ellas y otros que las llevarán con resignación. Por eso mismo se plantea una pregunta: ¿es posible eliminar esas marcas de la cara ahora, en plena madurez? La bióloga, Technical & Project Development Manager en Miin Cosmetics y coautora del libro ‘Aprende a cuidar tu piel’, Amparo Violero, nos da las claves.
Las cicatrices permanentes provocadas por el acné pueden ser diferentes, no todas son iguales. Tal y como indica como la experta, las más frecuentes, y permanentes son “las boxcar, icepick, rolling y las queloides”. No solo eso, también apunta que “existen otros procesos que se dan tras la inflamación que produce el acné que pueden causar manchas sin relieve que pasan de rojizas a oscuras-grisáceas, llamadas hiperpigmentación postinflamatoria, que pueden resolverse con tiempo y con los tratamientos adecuados”.
Eliminar ese tipo de marcas permanentes no es fácil. Sí que podemos cuidarlas para que no tengan un mal aspecto, pero una mejora considerable solo puede conseguirse con una “intervención dermatológica, como peelings médicos, láser o rellenos dérmicos”, señala la experta, que recalca que, cuanto antes se aborde, mejor. ¿Por qué? Primero, porque afecta a la calidad de la piel y, segundo, porque esas marcas pueden afectar a la autoestima de las personas.
¿Qué hacer si aún sigues sufriendo acné o quieres ayudar a que tu hijo lo lleve mejor? Violero explica que es primordial “no desatender la enfermedad, sobre todo si el problema sigue o va a más. Si los brotes no dan tregua, hay más probabilidad de formar cicatrices permanentes”.
Entonces, ¿qué podemos hacer para cuidar la piel cada día? La experta da tres pasos básicos: “limpieza, hidratación y protección solar”. Además, señala que es importante no manipular las lesiones y tener cuidado con los remedios caseros que prometen ser milagrosos.