El yoga es una disciplina que combina respiración y movimientos conscientes con óptimos resultados para la salud. Esta terapia, que cuenta con más de 2.000 años y que es fundamental en el Ayurveda o medicina tradicional india, cuenta cada vez con más adeptos por estos beneficios que atañen tanto a la salud física como a la mental.
El éxito del yoga es tal que ha empezado a emplearse en otras partes del cuerpo, como la cara. Se trata entonces del yoga facial, una serie de técnicas que, empleadas con regularidad, sí puede lograr una armonización del rostro, ya sea mitigando las arrugas o mejorando el tono muscular.
Muchas de las personas que hacen yoga facial también se someten a tratamientos de medicina estética, como pueden ser las infiltraciones de relleno de ácido hialurónico, una molécula muy valiosa porque es capaz de retener mucha agua (un gramo de ácido hialurónico puede retener hasta seis litros de agua), lo que significa que conserva de manera óptima la hidratación de la epidermis, la primera condición de una piel sana. La pregunta que podemos hacernos es cómo influye el yoga facial en las infiltraciones con ácido hialurónico. ¿Son o no aconsejables?
El yoga facial y el relleno de este ácido en pómulos, surcos nasogenianos y labios presentan algunas especificidades, como explica en su cuenta de Instagram los profesionales de Maiko Yoga Facial.
Para estos expertos, no está contraindicado, pero adviertan de que hay que dejar pasar al menos dos semanas desde que se produce la infiltración. Los mismos profesionales insisten en que es importante tener precaución al inyectar grandes cantidades de ácido hialurónico, ya que en muchos casos puede formar una película gruesa y persistir como un bulto. De hecho, no es aconsejable realizase ningún tipo de masaje o manipulación facial, lo que incluye tratamientos con aparatos, durante el mes posterior a la intervención. La razón es que el ácido hialurónico crea una inflamación inicial y necesita de un tiempo de adaptación y asentamiento en el rostro. Cualquier manipulación que implique mayor aporte sanguíneo, por tanto, puede ser contraproducente.
Además, hay otros cuidados que hay que mantener de manera escrupulosa durante esas primeras semanas. Estos son los principales según la doctora Victoria Prats.
Es fundamental que mantengas una adecuada limpieza facial diaria. Siempre es necesaria, pero después de un tratamiento con ácido hialurónico, tiene aún mucha más importancia. Con el tratamiento se han realizado múltiples punciones con agujas o cánulas y es muy importante que se mantenga la zona lo más limpia posible. La limpieza debe ser por la mañana y por la noche; es importante destinar una toalla solo para esta limpieza.
No hay que exponerte al sol los primeros días. También es importante el uso diario protección solar, incluso dentro de casa. Los rayos ultravioleta inciden en el rostro, dañando las células de la piel y esta necesita cuidarse extremadamente después de la realización de un tratamiento.
Además, si hay algún hematoma o señal, debemos evitar el sol aún más. La zona prodría pigmentarse y desarrollar las temidas manchas.
Mantener el rostro hidratado, con una crema adecuada, no demasiado grasa, es otro hábito clave. Cada piel, más sensible o más grasa, demandará un producto específico. El dermatólogo puede ayudar en la elección del mejor principio activo.
Al mismo tiempo, es importante hidratarse por dentro, bebiendo entre 1,5 y 2 litros de agua y evitando todo aquello que nos hace perder hidratación, como las fuentes de calor (por ejemplo, saunas o el propio sol), el alcohol y el tabaco.
Evita manipular la zona constantemente. Tenemos el acto reflejo de tocarnos al notar algo distinto en el rostro, pero debemod recordar que, tras la infiltración de ácido hialurónico, hay un proceso de inflamación que suele durar entre dos y tres días. Es normal notar el producto en ese tiempo. Si quieres favorecer el proceso anti-inflamatorio, duerme algo incorporada durante esos primeros días.
Dormir bien es fundamental, ya que durante el sueño nuestro organismo pone a punto su sistema de curación. Además de eso, es aconsejable no realizar ejercicio físico en dos o tres días. La actividad física puede favorecer la inflamación y no es recomendable que la zona infiltrada reciba más aporte sanguíneo.
Los expertos insisten en que estas las recomendaciones básicas después de una tratamiento con relleno de ácido hialurónico. Pero lo mejor es el cuidado concreto del profesional médico. Cumple con sus indicaciones y nunca tomes ningún medicamento por tu cuenta.