Gracias a ‘Sexo en Nueva York’ Kristin Davis y sus compañeras de reparto vivieron unos años que, profesionalmente, fueron muy dulces, aunque también tuvieron sus sombras, especialmente en una época en la que los juicios sobre el cuerpo de una mujer eran mucho más duros que los actuales. Y eso le ocurrió durante años a la actriz que interpretó a Charlotte y lo sigue haciendo en ‘And Just Like That…’, aunque ahora no duda en mostrarse como es, a cara lavada y sin rastro de maquillaje.
Fue lo que hizo hace unos días en sus redes sociales, donde puso una foto recordando su viaje a Kenia sin nada de maquillaje y con el pelo sin peinar. “Con Jet Lag, pero el pelo alborotado de Kenia lo vale”, escribía la intérprete en su Instagram, donde recibió los elogios de sus seguidores, que aplaudían que se mostrase sin filtros a sus casi 60 años.
La actriz se muestra así ahora, pero durante años se sintió juzgada por la cantidad de comentarios negativos que recibía por su aspecto y que expresó hace unos meses en una entrevista con The Telegraph donde explicó haberse sentido “ridiculizada” en Internet por los tratamientos estéticos a los que se había sometido.
Davis no esconde que se ha puesto botox, pero también relleno facial, que “unas veces me ha ido bien y otras me ha ido mal. Es un reto recordar que no tienes que tener ese aspecto joven siempre”, pero desde hace tiempo no se pone, lo que hizo que le llegaran todavía más comentarios negativos que le generaron un gran estrés, haciendo que derramase más de una lágrima.
Todo vino a raíz de su gran exposición en ‘Sexo en Nueva York’ que, pese a reconocer todo lo bueno que le trajo, también le generó una visión negativa sobre sí misma e hizo que la experiencia tuviese una parte dolorosa por “toda la vergüenza corporal a la que he estado sometida durante los últimos 25 años”.
Una etapa dura porque recuerda que hasta los medios de comunicación empezaron a compararla con Sarah Jessica Parker, su cuerpo “con forma de pera” frente a la delgadez de su compañera y amiga. “Es muy duro oír esas cosas y que luego te digan que todo el mundo debería amar su cuerpo. Cuando llevas décadas sufriendo esto es muy difícil decir que estás bien y que te encanta tu cuerpo”, reflexionaba.
Con el tiempo, Kristin Davis ha conseguido trabajar en esos juicios externos sobre su cuerpo e incluso recuperar el personaje que tantas alegrías le dio. “He trabajado en mí misma, es algo que se aprende a hacer con el tiempo. Aquí estoy y no soy perfecta. No debería tener que decirlo, pero me alegra hacerlo”, decía hace casi un año feliz con ella misma.