Reconozcámoslo. Pasada cierta edad, los zapatos incómodos y los tacones imposibles nos provocan cada día más pereza. Es algo que vengo observando, especialmente en los últimos meses, y, después de compartir esta sensación con mis amigas, te diré que no es un caso aislado. Me consuela pensar que no estoy sola.
Fue precisamente mi amiga Laura la que me abrió los ojos a un mundo de comodidad que no conocía al recomendarme "las zapatillas más cómodas del mundo". "Tienes que probarlas, en serio, son todo un descubrimiento", me dijo. No necesité mucho más y esa misma noche me metí en su web para comprarlas.
La cosa prometía. Además de ser las más cómodas del mundo, como apuntaba Laura, las zapatillas Yuccs, según su web, son sostenibles y se fabrican en España. El diseño me pareció atemporal y sencillo, perfecto para combinar con cualquier look y hay tantos colores que me costó elegir. Empezábamos bien...
Hay que agradecer que en los últimos años la moda se haya puesto de nuestra parte y que las 'sneakers' se impusieran en combinaciones que antes nos parecían imposibles más allá de la ropa de deporte. Lógicamente no todas son la panacea (algunas hacen tantas rozaduras y heridas como los'‘stilettos' más altos) y en esta búsqueda eterna por llegar a casa sin un terrible dolor de pies, estas zapatillas se han convertido en mis favoritas. Hasta mi madre, que al principio renegaba de esta tendencia, ha sucumbido ante ellas y ahora está encantada. Pero, espera, que hay más... Mi marido (son unisex) me las ha copiado y ahora vamos a juego. Creo que las vamos a ver por todas las calles de la ciudad.
Volvamos a la historia. Unos días después de realizar mi pedido, llegó a casa un precioso par de zapatillas beis de lana merina. Un momento, ahora estarás pensando: "¿Lana merina? Qué calor, ¿no?". Es algo que medité cuando descubrí su material, pero la lana merina tiene la capacidad de regular la temperatura y se adapta, manteniendo el pie fresco en verano y caliente en invierno.
Esta es una de las claves de su éxito y, además, por varias razones. No solo han logrado incorporar un tejido suave, transpirable y sin malos olores, sino que también se ha cuidado mucho el diseño y los materiales de la plantilla y la suela, y todo ello manteniendo un compromiso por la producción 100% local y el uso de materiales totalmente naturales.
Algunos de sus modelos son tan demandados que tienen una lista de espera, pero te aseguro que merece la pena. Además, todos los envíos y devoluciones son gratuitos y recientemente han anunciado en su web que extienden su política de devoluciones hasta el 15 de enero.
Ya te he adelantado que se han convertido en mis favoritas, pero... ¿por qué? Decidí poner a prueba ese confort infinito de las Yuccs en mis ya delicados pies. Para mi sorpresa, no solo no sufrí ningún tipo de rozadura, sino que terminé de enamorarme de ellas. La suela tiene cierta altura y además amortigua muy bien la pisada. La plantilla también es extraíble y totalmente ergonómica al pie.
Desde ese momento, no me las he quitado ni un solo día. Las salidas diarias se han vuelto una necesidad para despejarme y moverme. Voy tan cómoda con ellas que no quiero usar otra cosa. Hasta me he atrevido a ponérmelas sin calcetines y, gracias a su forma sin costuras, parece que usaras unas zapatillas de estar por casa.