En cuestiones de cuidado de cara, cualquier hombre siempre pone demasiado énfasis. Y no es para menos cuando se trata de nuestra carta de presentación. Lucir frescos, descansados y con brillo (pero no en exceso) son cosas que buscamos a toda costa. Comunicar que hemos descansado o que el estrés no ha hecho estragos son casi detalles imposibles. Pero a todo mal siempre hay una solución.
Uno de los primeros signos de envejecimiento que notarás, aparte de quedarte sin aliento al subir un tramo de escaleras, va a ser la piel alrededor de tus ojos. Un día despertarás, te mirarás al espejo, y verás ojeras más pronunciadas, patas de gallo e incluso un poco de flacidez debajo de los ojos, lo cual puede hacerte parecer mucho más viejo de lo que eres.
El día a día (y las noches), junto con la falta de sueño acelerará este proceso de envejecimiento. Por eso, es fundamental que los hombres, incluso a partir de los 20 años, incorporen en su rutina diaria una crema especialmente formulada para el contorno de ojos. El uso de un buen producto ayudará a proteger esta piel más fina y frágil, a la vez que combate la hinchazón y la inflamación y previene las ojeras.
El contorno de ojos puede ser un gran aliado siempre y cuándo se utilice de manera correcta. El objetivo del producto es conseguir que se absorba correctamente en la piel, para que pueda trabajar bajo la superficie, donde está el problema.
La regla de oro es aplicar los productos desde el más ligero hasta el más pesado, para que los más pesados puedan penetrar a través de los más ligeros y todos puedan ser absorbidos adecuadamente. Así que si tu contorno de ojos es más rico y denso que la crema hidratante, aplícalo después. Si es más ligero que el sérum, aplícalo antes, y así sucesivamente. Toma nota de lo que no hay que hacer al aplicarlo.
No hace falta utilizar una gran cantidad de contorno. No caigas en la trampa de que cuanta más crema haya, mejor para las arrugas. Tu piel actúa como una esponja cogiendo solo lo que necesita. La cantidad equivalente a un grano de arroz debe ser suficiente para cada ojo. Si aplicas esta cantidad y todavía te sobra, elimina el sobrante y reduce la cantidad que estás usando.
Sí, el contorno de ojos debe estar cerca de los ojos, pero no debe ponerse nunca en el párpado superior, ni debe usarse directamente debajo de las pestañas inferiores. Tampoco debe tocar las pestañas, ya que esto podría ocluir los folículos de las pestañas causar una caída prematura del vello.
Hay que ser meticuloso al aplicar el contorno de ojos. Debe aplicarse a lo largo del hueso orbital, o la cuenca del ojo. No hay nada malo en extenderse un poco por debajo del párpado inferior hasta la parte superior de la mejilla, ya que la piel también es frágil allí.
Es importante no descuidar ciertas áreas del ojo que son propensas al envejecimiento, como la esquina del ojo que se extiende hasta la sien, donde se forman las patas de gallo. Así que no tengas miedo de extenderte justo antes de la línea del cabello.
Para aplicarlos, se debe utilizar el dedo anular porque tiene menos músculo y la presión que se ejerce es menor. Utiliza la yema de este dedo, que ofrece la cantidad perfecta de presión; los otros dedos son demasiado fuertes y pueden causar arrugas al tirar demasiado fuerte.
No seas bruto al aplicar el contorno de ojos como harías con la crema hidratante. Coloca 4-5 puntitos de producto separados, comenzando en la esquina exterior del ojo (donde están las patas de gallo), y terminando en el hueso orbital.
Utiliza la yema del dedo anular para esparcir el contorno a toquecitos suaves con movimientos laterales a lo largo de toda la zona. No tires ni frotes la piel, ya que puedes causar irritación y flacidez en la zona. Si tienes ojeras y bolsas, puedes aplicar una ligera presión desde la esquina interior de los ojos hacia las sienes.
Generalmente se debe de aplicar por las mañanas, tras limpiar la piel y como parte de la rutina de cuidado facial. La mayoría de las personas también se ponen la crema de contorno de ojos antes de dormir, pero esto es un error.
Si usas una crema para los ojos por la noche, los ingredientes pueden migrar hacia los ojos debido a la inclinación de la cavidad ocular. Las lágrimas naturales crean una vía para que se filtre en el ojo, lo que produce hinchazón y picazón, y por la mañana despiertas con el área debajo de los ojos hinchada.
Guardar el contorno de ojos en el frigorífico es una buena manera de despejar los ojos rápidamente por las mañanas, ya que además de sus propiedades, el frío puede eliminar las bolsas al mejorar la circulación.