De Cádiz a Barcelona: ¿cuáles serán las zonas costeras más afectadas por la subida del nivel del mar?

  • Un mapa de expertos de la NASA y de Naciones Unidas representa las secuelas de la crecida del nivel del mar en todas las ciudades de costa

  • Muestra distintos posibles escenarios según la evolución de la emisión de los gases de efecto invernadero como el CO2

  • Incluso en el supuesto menos extremo muchas ciudades españolas tendrían que asumir la crecida del mar porque ya es irreversible

En agosto pasado, la NASA presentó un completo mapa del mundo que muestra cómo se va a transformar el litoral de todos los continentes debido al ascenso del nivel del mar en las siguientes décadas. En Uppers nos hemos acercado a los datos para consultar cuáles son las costas españolas más afectadas por el aumento del nivel del mar y de cara a un futuro próximo cuánto subirá el nivel del mar en 2050.

El mapa forma parte del sexto borrador del informe acerca del cambio climático realizado por el IPCC, el Grupo Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático de Naciones Unidas. Destaca que las consecuencias ya son irreversibles a pesar de los cientos de alertas y avisos que la comunidad científica ha hecho durante años. Tras llevar a cabo millones de previsiones, el mapa expone sobre la mesa la urgencia de reducir las emisiones no ya para revertir la situación, pero sí para evitar que sea tan extrema. Según alerta el estudio, la crisis climática de aquí a 2100 “ahogará” al mundo.

Crecida del mar en las costas españolas

Si nos centramos en la Península Ibérica, el mapa indica que el incremento del nivel del mar se producirá en todas las ciudades costeras, pero en algunas será mucho más llamativo. Según el primer escenario que han dibujado, el menos extremo, dentro de 30 años, para 2050, el nivel del mar en Cádiz y en Barcelona habrá ascendido 24 cm y en Santa Cruz de Tenerife 26 cm. En 2060, en Cádiz habrá subido 26 cm, en Barcelona 29 cm y en Santa Cruz de Tenerife 31.

El problema es que el agua no tendrá freno y de cara a 2080 la menor subida en estas tres ciudades habrá sido de unos 40 cm. Además, a estas se unirían A Coruña y Santander con una crecida del nivel del mar que superaría los 45 cm. Valencia, Vigo, Santa Cruz de la Palma, Huelva, Arrecife, Palma de Mallorca, Gijón, Málaga, Almería y Alicante sufrirían secuelas parecidas.

El informe recuerda que el nivel del mar ha aumentado tres veces más en los últimos años que en todo el periodo comprendido entre 1901 y 1971. En el escenario más drástico y extremo que plantea el mapa del IPCC y la NASA, toda la costa de nuestro país sufriría un aumento del nivel del agua de 30 cm en unos 30 años y llegarían a los 40 cm para 2080.

También apuntan que este escenario, aunque es el menos probable no es imposible si las tasas de emisiones de gases de efecto invernadero siguen siendo tan elevadas. Es evidente que las zonas adyacentes a las ciudades más afectadas también sufrirán las consecuencias, así como muchas de las áreas naturales protegidas como el delta del Ebro o el Parque Nacional de Doñana.

Secuelas irreversibles para las zonas de costa

Los expertos adelantan que muchas secuelas ya son irreversibles. Es indispensable que las zonas de costa adapten sus infraestructuras con el objetivo de evitar que sean destruidas o terminen inundadas. En el litoral mediterráneo durante años se ha permitido la construcción de viviendas, paseos marítimos, áreas de recreo… en zonas no recomendables por la acción de la naturaleza. Estos lugares tan urbanizados y sin apenas protección natural frente a una eventual crecida del mar quedan expuestos totalmente. Los científicos dejan claro que ya mismo es necesario aprender a vivir en un nuevo entorno porque no hay soluciones ni a corto, medio o largo plazo, sino a muy largo plazo.

Este informe, además de abarcar estos posibles escenarios con los correspondientes incrementos del nivel del mar en cada caso, desarrolla los efectos del cambio climático sobre la vida humana como los grandes incendios, la pérdida de la fauna, la reducción de las capas de hielo o el aumento significativo de las temperaturas. Todo ello causado por la emisión sin tregua de gases de efecto invernadero a la atmósfera con gases como el vapor de agua (H2O), el dióxido de carbono (CO2), el óxido nitroso (N2O), el metano (CH4) y el ozono (O3).

En estos escenarios futuros sobre los que ha trabajado el IPCC podrían producirse desde las consecuencias menos dañinas si se redujeran las emisiones de CO₂, con un aumento de 1,5ºC de las temperaturas en 2050, hasta las más extremas debido a un incremento en 2,6ºC.

Los científicos constatan que por ejemplo en el Mediterráneo han aparecido y van en aumento ciclones tropicales, llamados medicanes, que agravarían el hecho de que el nivel del mar se encuentre ahora a mayor altura que antes. Igualmente se suceden nuevos fenómenos tormentosos de mayor intensidad con tempestades en épocas del año y en zonas donde nunca se habían dado. En 30 años, la multiplicación de las tormentas junto al continuo incremento del nivel del mar podría provocar olas que se adentraran en tierra entre 20 m y 30 m.

Está claro que no hay marcha atrás, sin embargo, las consecuencias serían menos graves con una potente reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, con el desarrollo inmediato de tecnologías que capten el CO2 y con inversiones en las zonas costeras desprotegidas.