Lo único que comparten la sardina y la anchoa es que son el mismo tipo de pescado azul, que viven en bancos o cardúmenes para defenderse de los depredadores y dos de sus hábitats, el Mediterráneo y el Cantábrico. El resto son todo diferencias, empezando por su sabor, aunque muchas veces el consumidor las confunda. En Uppers vamos a comprobar la diferencia entre sardina y anchoa. En realidad, ambas son tan sanas que da igual equivocarse.
Nada más terminar esta Semana Santa, en cuanto arranca el mes de abril, comienza la temporada de pesca de la anchoa que se alarga hasta septiembre, tanto en el Mar Cantábrico, como en el Océano Pacífico además de en el Mediterráneo. La época de la sardina empieza poco después, en mayo, para concluir en octubre. En cuanto al área de captura, en cambio se extiende al Atlántico junto al Mediterráneo y el Cantábrico.
La anchoa, el boquerón o el bocarte es uno de los pescados azules más consumidos en España. Son la misma especie, Engraulis encrasicolus, a la que se la bautiza con uno u otro nombre según su elaboración y conservación: en salmuera (anchoa), en vinagre (boquerón) o frita (bocarte) de modo que parecen tres tipos distintos de pescados porque además cambia radicalmente el sabor.
En el mar la anchoa no vive sola sino que se mueve en cardúmenes o bancos para protegerse de sus depredadores. Su principal alimento es el plancton, las larvas de los moluscos y pequeños crustáceos. Suele permanecer a más de 100 metros de profundidad, sin embargo, en el Cantábrico hacia el mes de abril, cuando la temperatura de las aguas empieza a templarse, el banco de anchoas se acerca a la costa, que es el momento en el que se pueden capturar. En el Mediterráneo este acercamiento suele producirse en mayo. Entre septiembre y octubre termina la temporada de pesca de modo que si se ofrece anchoas en una pescadería a partir de ese momento procederán de otros países.
La captura de las anchoas se realiza utilizando la técnica del cerco, que consiste en introducir una red tubular de gran tamaño en los cardúmenes para que los ejemplares entren dentro. Después se cierra como si fuera una bolsa y la red se sube al barco para conservar las anchoas en cajas con hielo en una zona refrigerada hasta llegar al puerto.
En cuanto a la sardina también es muy consumida sobre todo en conserva. El peso que alcanza oscila entre los 50 y los 200 gramos y a las más pequeñas se las denomina sardinillas. El nombre de su especie, Sardina pilchardus, se debe a su abundancia en las costas de Sardinia, en la isla de Cerdeña.
Es un pez pelágico, lo que quiere decir que el cardumen vive en aguas medias o cerca de la superficie y limita al máximo su contacto con el fondo marino o con la costa. Se alimentan sobre todo de plancton, que aumenta en cantidad con la subida de la temperatura en las aguas superficiales. En invierno las sardinas han acumulado más grasa de modo que se preparan para su época reproductiva. Su captura se realiza empleando tanto redes de arrastre, como las técnicas del cerco o el enmalle.