Originaria de la India, la moringa se ha utilizado en medicina Ayurveda, una la milenaria ciencia de la vida que te mantiene saludable, para prevenir y tratar más de 300 enfermedades: anemia, ansiedad, asma, bronquitis, cólera, conjuntivitis, dolor de cabeza, de garganta, escorbuto, hipertensión, úlceras, etc. Antes, en el Antiguo Egipto, la moringa era considerada un producto exótico y de lujo que se regalaba a reyes que se llevaban a la tumba en sus vasijas con el resto de sus tesoros. Actualmente, ha vuelto a ponerse en el punto de mira por las numerosas investigaciones científicas que respaldan muchos de sus usos medicinales y cosméticos milenarios.
La moringa oleifera es un árbol de gran valor nutricional y numerosas propiedades terapéuticas. Se le conoce como Morango, árbol de la vida o árbol milagroso ya que se utiliza en casos de desnutrición, hipovitaminosis, anemia, etc. e incluso para purificar y potabilizar el agua. Prácticamente todas las partes del árbol se comen, pero en las hojas es dónde se concentran la mayor cantidad de nutrientes, siendo la forma más popular de consumir infusionando las hojas o añadir el polvo a multitud de preparaciones.
Se dice que la moringa es un alimento tan completo que una persona podría sobrevivir tomando sólo moringa y agua, ya que contiene una cantidad de vitaminas y minerales única: aporta más calcio que el sésamo, más potasio que el plátano, más vitamina A que la zanahoria y más proteína que cualquier otro vegetal. La moringa es un alimento único que destaca por ser un vegetal rico en proteínas completas (un 25% de su contenido), es decir proteínas que contienen todos los aminoácidos esenciales. Las proteínas vegetales no son proteínas completas, el caso de la moringa es un caso fuera de lo normal, siendo de gran interés sobre todo para veganos y vegetarianos. El contenido en vitaminas y minerales es asombroso ya que la moringa contiene 15 de los 20 minerales destacando calcio y hierro y contiene 7 de las 13 vitaminas (vitaminas del grupo B, vitamina A, C y E).
Las propiedades de la moringa incluyen acción antioxidante, antiinflamatoria, analgésica, antidiabética, vasodilatador, anticolinérgico, antireumático, antihipertensivo, antiobesidad, antimicrobiano, hepatoprotector y cicatrizante. Muchas de estas propiedades todavía se encuentran en estudio y los resultados no son concluyentes, por ello debe ser utilizada con precaución y preferiblemente bajo acompañamiento médico.
1. Aumento de la capacidad respiratoria
Según un estudio científico, la ingesta de moringa podría ayudar a aliviar los síntomas y la severidad de los ataques de asma.
2. Prevenir la diabetes
La moringa posee propiedades que ayudan a regular el estrés oxidativo debido a su propiedad antioxidante y a su vez favorece la disminución de los niveles de azúcar en sangre.
3. Protege el corazón
Al ser rica en fibras, el consumo de moringa podría evitar la absorción de colesterol en el intestino. Además, esta planta posee diversos compuestos bioactivos como la quercetina y polifenoles que actúan como antioxidantes y reducen la inflamación crónica, disminuyendo así el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
4. Regula la presión arterial
Debido a la presencia de tocoferoles, polifenoles, y flavonoides, la moringa regula la presión arterial debido a que posee propiedades vasodilatadoras, que ayudan a relajar los vasos sanguíneos y mejorar la circulación de la sangre.
5. Ayuda a perder peso
La moringa es una planta rica en fibras y en proteínas que ayudan a aumentar la sensación de saciedad, disminuyendo la cantidad de alimentos que son ingeridos y favoreciendo la pérdida de peso.
6. Prevenir y combatir la anemia
Las hojas de la moringa poseen una elevada cantidad de hierro, por lo que su consumo regular, podría favorecer el aumento de los glóbulos rojos, la hemoglobina, el hematocrito y del total de hierro en sangre, previniendo y combatiendo la anemia.
7. Podría aumentar las defensas del organismo
La moringa posee sustancias antioxidantes como polifenoles, vitamina C y betacarotenos, sustancias que estimulan el sistema inmune y ayudan a combatir infecciones y microorganismos.
8. Posee efecto antiinflamatorio y analgésico.
Gracias a sus compuestos bioactivos como isotiocianatos, quercetina, polifenoles, ácido clorogénico, vitaminas C y A, la moringa podría ayudar a reducir la inflamación en el organismo, aliviando los síntomas de enfermedades como reumatismo, artrosis o la inflamación de la próstata, por ejemplo.
9. Proteger e hidratar la piel
La moringa es una planta muy nutritiva, pues aporta vitaminas C, A y del complejo B, las cuales favorecen la producción de colágeno, la cicatrización y la hidratación de la piel, protegiéndola de los daños causados por los rayos UV.
10. Mantener la salud visual
La moringa es rica en betacaroteno, un componente precursor de la vitamina A, que es importante para mantener la salud visual, ya que esta vitamina es necesaria para la producción de ciertos pigmentos visuales para ver el espectro de la luz.
11. Podría disminuir los efectos de la menopausia
Debido a que ayuda a mantener los niveles de inflamación y de estrés oxidativo durante esta etapa, el consumo de moringa podría generar un balance natural de las hormonas que se ven afectadas durante esta fase, aliviando así los síntomas de la menopausia.