La comunidad autónoma que más vino vende en España
La Rioja ha sido superada por Castilla y León como la Comunidad Autónoma líder en venta de vinos en alimentación y hostelería de España
Castilla y León cuenta con diversas denominaciones de origen, entre las que destacan la Ribera del Duero, Toro y Rueda
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Los vinos de Castilla León han desbancado a los de La Rioja. En un giro sorprendente en el sector vitivinícola, los vinos de la Comunidad Autónoma de Castilla y León, con Denominación de Origen, han tomado la delantera en el mercado nacional de alimentos y hostelería, desplazando a los tradicionalmente líderes de la Comunidad Autónoma de La Rioja.
Castilla y León es una región de España conocida por sus vinos, tanto por su calidad como por su rica historia y tradición. Cuenta con 14 zonas reconocidas por sellos calidad con más de 75.000 hectáreas cultivadas y 18 millones de kilos de producción cada año.
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Los romanos ya cultivaban la vid en esta tierra y los monjes medievales la utilizaron para generar ingresos para sus monasterios. En la actualidad, Castilla y León cuenta con diversas denominaciones de origen, entre las que destacan la Ribera del Duero, Toro y Rueda.
Los vinos tintos son los más conocidos, pero también se producen blancos y rosados de gran calidad. Además, las bodegas de la región ofrecen una amplia variedad de vinos de crianza y espumosos, y se pueden visitar para descubrir su proceso de elaboración en fantásticos paisajes vitivinícolas.
¿Cómo son los vinos de Castilla León?
Los vinos de Castilla y León son muy valorados por su calidad y sabor, y reconocidos a nivel internacional. En particular, los vinos de la Ribera del Duero son muy apreciados por su aroma y su cuerpo. Esta región cuenta con una larga tradición vinícola, que se remonta a la época romana. El clima y las condiciones del suelo de la Ribera del Duero son ideales para el cultivo de la vid, y la combinación de variedades autóctonas y técnicas modernas de vinificación hacen que estos vinos sean únicos.
Los vinos de Castilla y León son aquellos elaborados en las 317 localidades de las provincias de Ávila, Burgos, León, Palencia, Salamanca, Segovia, Soria, Valladolid y Zamora. Se caracterizan por la influencia del clima mediterráneo con pocas lluvias, pero se distinguen por su gran variedad de suelos de los terrenos que ocupan. Dentro de los vinos de Castilla y León se encuentran tanto los vinos de la Tierra como los que se engloban dentro de las denominaciones de origen, siendo las siguientes las más conocidas: D.O. Bierzo, D.O. Tierras de León, D.O. Toro, D.O. Cigales, D.O. Ribera del Duero entre otras.
5 vinos de Castilla León que hay que probar
- Carmelo Rodero TSM 2019. Carmelo Rodero TSM es un vino tinto de la D.O. Ribera del Duero elaborado por la Bodegas Rodero. Carmelo Rodero continuó con la tradición familiar y comenzó cultivando las viñas pertenecientes a su familia durante unos años pero más tarde decidió desvincularse de ésta, y en 1990 inició su propia andadura. Carmelo Rodero TSM está elaborado por uvas de la variedad Tinta del país (75%), Cabernet Sauvignon (10%) y Merlot (15%) procedentes de viñedos propios de más de 40 años. Se realizó una elaboración tradicional con un seguimiento del control de fermentación y maceración. Por último, este vino se crió 18 meses en barricas 100% roble francés de menos de 2 años de antigüedad.
- Dominio de Es La Diva 2019. El francés Bertrand Sourdais confirma su devoción por los viñedos más remotos e inexplorados de la Ribera del Duero con este vino, en el que saca partido de las parcelas más longevas que se asientan en los grands crus del valle de Atauta. El vino es armonioso, y en el contexto de las otras dos añadas, mantiene la elegancia y el aplomo, como si esta parcela absorbiera el efecto de las añadas de forma diferente
- Gran Arzuaga 2018. Este vino proviene de un ensamblaje inédito. Mezcla de Tempranillo (original de cepas más que centenarias de suelos arcillosos rojos y arenas finas con cantillos en superficie) junto a Cabernet-Sauvignon, (procedente de nuestra finca La Planta que son suelos muy calizos casi limitantes para el cultivo de la vid). Rendimientos mínimos, casi exiguos y un larguísimo ciclo vegetativo, hicieron a estos viñedos tener una madurez completa con un equilibrio legendario.
- Pago de Carraovejas Cuesta de las Liebres 2018. Cuesta de Las Liebres es la cuna de un tempranillo apasionante. Procedente de la viña más precisa y pura. Elaborado solo en vendimias únicas. La viticultura asume el reto del de un relato en igualdad entre el ser humano y la naturaleza. Un vino radical, de raíz. Potente y muy persistente. Un vino auténtico.
- Pingus 2019. Es increíblemente fresco, aromático y armonioso en una añada cálida. La palabra que mejor describe este vino es precisión: es limpio, centrado, equilibrado y delineado.