Errores que cometes al limpiar tu cafetera italiana y por los que tu café sabe muy amargo

Según un último informe sobre los “Hábitos de Consumo de Café en España” realizado por la cadena Café & Té, el 63 % de los españoles mayores de 15 años, unos 22 millones de personas, declara tomar al menos un café diario. El informe concluye que los consumidores más habituales de café en España consumen un promedio de 3,6 cafés diarios entre semana. Los fines de semana la media del consumo del café baja, situándose en 2,7 tazas al día.

La cafetera italiana también conocida como cafetera moka, es todo un icono en la cultura del café y aunque ahora priman las cafeteras de diseño, lo cierto es que su café es el más auténtico. Su diseño simple y eficiente la convierte en una opción atractiva para quienes buscan disfrutar de un buen café sin la necesidad de invertir en máquinas más sofisticadas.

Pero como todo, hay que saber cómo utilizarla para sacarle el mayor rendimiento. Su aparente simplicidad hace que muchos amantes del café cometan una serie de errores a la hora de limpiarla que pueden tener un impacto directo y más que notable en el sabor y la calidad del café.  

  • Usar detergentes fuertes. El error número uno que debes evitar al limpiar tu cafetera italiana es el uso de detergentes fuertes o productos químicos agresivos. Aunque podamos pensar que con estos productos se eliminaran los residuos de café y aceites, en realidad pueden tener el efecto contrario. Los detergentes fuertes pueden dañar el revestimiento interior de la cafetera e influir negativamente en el sabor del café. Los residuos químicos pueden impregnarse en las paredes y componentes de la cafetera, afectando el sabor y el aroma del café. 
  • No desarmar la cafetera. No vale solo con limpiarla de manera superficial.  Hay que evitar el error de no desmontarla por completo antes de limpiarla. Desarmar la cafetera permite llegar a todas las áreas que necesitan limpieza. Esto incluye desmontar la cámara de filtrado, quitar la junta de goma y asegurarse de que cada componente se limpie minuciosamente. Ignorar esta etapa significa que ciertas áreas pueden quedar sin limpiar y, con el tiempo, acumularán residuos que afectarán la calidad, sabor del café y la higiene de la cafetera.
  • Usar lavavajillas. Otro error común es meter la cafetera en el lavavajillas. A pesar de que los lavavajillas son convenientes para limpiar utensilios de cocina, las altas temperaturas y la humedad en el lavavajillas pueden dañar ciertas partes de la cafetera italiana. La exposición al calor y la humedad puede hacer que las juntas de goma se deterioren más rápido. 
  • Dejar restos de café. No limpiar adecuadamente la cafetera italiana después de cada uso es un error que debes evitar a toda costa. Dejar restos de café dentro de la cafetera puede llevar a la acumulación de manchas, residuos de café reseco y, en última instancia, olores desagradables. Además, con el tiempo, estos restos pueden obstruir los conductos de agua. 
  • No limpiar regularmente. Esperar a que se acumulen grandes cantidades de residuos antes de limpiar la cafetera es un error garrafal. La limpieza regular es fundamental para mantener la calidad del café y la longevidad de la cafetera. La acumulación de residuos puede afectar la presión y el flujo de agua, lo que influye directamente en la extracción y el sabor del café. 

¿Cómo limpiar la cafetera italiana correctamente?

Para mantener la calidad y disfrutar del café más sabroso, en una cafetera italiana es fundamental mantenerla impoluta. ¡Así se lava la cafetera italiana de manera adecuada!

  • Desmontar la cafetera. Lo primero es desmontar la cafetera. Esto generalmente involucra tres partes principales: la base, el filtro y la jarra. Asegúrate de que la cafetera esté fría antes de hacerlo.
  • Enjuagar con agua caliente. El primer paso de limpieza es el enjuague con agua caliente. Llena un recipiente grande con agua caliente y sumerge las partes desmontables. Agrega unas gotas de jabón suave en el agua puede ayudar a aflojar los residuos de café y aceite.
  • Limpiar el filtro y el embudo. Usa un cepillo suave o un cepillo de dientes para limpiar el filtro y el embudo. Estas partes tienden a acumular más residuos. 
  • Limpiar el interior. Usa un cepillo largo y delgado para limpiar el interior de la cafetera. Presta atención a la tubería que conecta la base con el filtro, ya que es una parte propensa a atascarse y acumular restos de café.
  • Enjuague final. Después de limpiar todas las partes por separado, enjuágalas bien con agua caliente para eliminar cualquier residuo de jabón. Asegúrate de que no quede jabón, ya que esto puede afectar el sabor del café.