Hace unos años muy pocos hombres lo hacían, pero parece que la voz ha corrido y cada vez más se atreven con la depilación láser. Atrás quedan esas dolorosas sesiones de depilación con cera. El refrán “para presumir hay que sufrir” también queda cada vez más lejos. Ya no solo los deportistas quieren tener la piel suave y sin rastro de pelo. ¿Y lo mejor del láser? En cada sesión se pierde cada vez más pelo hasta llegar a la depilación definitiva. En unos antes y en otros más tarde, todo dependerá de la cantidad de vello de cada uno.
El dolor de la depilación con cera cuando se hacía en el abdomen, la espalda o las piernas ya es cosa del pasado, si quieres claro. El láser es cada vez más conocido y los centros de estética no solo se centran en las mujeres, sino también en el cuidado corporal de los hombres.
Pero si estás pensando en empezar con unas sesiones, ten en cuenta que es un poco diferente a las de las mujeres. Ellas tienen menos volumen de pelo, por lo que van a tener que ir mucho menos al centro estético. En cambio, por lo general los hombres tienen un volumen mucho más grande de vello, además de ser más grueso, por lo que es más difícil de eliminar por completo. Por tanto, un hombre necesita más sesiones que una mujer para eliminar por completo el pelo de la zona deseada.
Si para ti eso de “donde hay pelo hay alegría” no es así, lo primero y mejor es que elijas el centro estético que más confianza te dé y, una vez decidido, pedir información. Una pequeña prueba para ver si tu piel reacciona de alguna forma fuera de lo normal, analizar el pelo de la zona que se va a tratar para programar cuantas sesiones puede suponer la eliminación total, o las indicaciones que debes tomar después de cada visita al centro.
Cuando acudas al centro, lo más probable es que el experto que te atienda te informe o recomiende la fotodepilación con láser o con luz pulsada (ILP), muy similares pero cada una con sus características propias. Por ejemplo, la luz pulsada se usa preferentemente en aquellos hombres que tienen un pelo oscuro y grueso y con un tono de piel claro. Eso sí, serán necesarias más sesiones que con el láser, que es mucho más eficaz, y por tanto, más caro.
Por lo general, las primeras visitas son las más dolorosas, puesto que es el momento en el que el pelo está más fuerte. En general, el experto te pedirá que si el dolor es muy fuerte, le avises para bajar la intensidad. Por suerte, cuando el pelo empiece a caer, cada vez el dolor será menor y solo sentirás unas pequeñas punzadas cada vez que el láser actúa. Y un dato muy importante para poder realizar cada sesión, es necesario que acudas con la zona rasurada del día antes.
Seguro que también has visto algunas máquinas que se pueden comprar en tiendas para realizar tu mismo la fotodepilación desde casa. Suelen ser bastante efectivas y más cómodas, pues no tienes que acudir hasta el centro. Eso sí, antes de usarla lee bien las instrucciones e indicaciones que presenta y, si es posible, consulta a un experto sobre uso y si notas que tu piel no está reaccionando del todo bien.
Cuidar la piel es importante, pero si estás recibiendo la depilación láser, más aún, sobre todo en los días posteriores. El pelo hay que quitarlo con una cuchilla o maquinilla que lo rasure, nada de arrancar el pelo de raíz con cera o maquinilla que en vez de recortar, arranque.
También es importante no tomar el sol ni antes ni después y que la piel esté lo más clara posible, por eso se recomienda realizar el tratamiento en los meses de otoño e invierno. Tampoco es recomendable hacer deporte hasta dos o tres días después de la sesión. Y si ya de por sí hay que mantener hidratada la piel, después de cada sesión más todavía para calmar las posibles rojeces que se puedan producir.
Recuerda que en los hombres será necesario más sesiones de las que llevan las mujeres, y que se debe separar cada una entre dos o tres meses, dependiendo de las recomendaciones del experto. Y sí, puede ser la depilación definitiva, pero también hay probabilidad de que, tras un tiempo, el pelo vuelva a salir, así que no te confíes del todo.