Dentro de los viajes que ofrece el Imserso, los jubilados y pensionistas también pueden decantarse por uno de los 70 establecimientos termales que se encuentran repartidos por toda la geografía española. Es un tipo de destino diferente donde se apuesta por los beneficios relajantes y terapéuticos de las aguas termales en vez de por la estancia en un entorno de playa o las visitas turísticas. De todo ese listado de posibles opciones, en Uppers vamos a señalar cuáles son los mejores balnearios del Programa de Termalismo del Imserso 2024 según los últimos rankings.
Como puntualización inicial, no todas las aguas termales son iguales, porque se clasifican en base a tres condiciones: temperatura, composición química y propiedades terapéuticas.
De los 70 espacios termales que propone el Programa de termalismo del Imserso para 2024, estos son los mejores, según diversos ranking de portales de vacaciones o plataformas especializadas.
Este espacio se encuentra en la localidad de Montbrió del Camp, en Tarragona. Se trata de un gran hotel que dispone de un espacio de mil metros cuadrados al que ha denominado Aquatonic. En esta gran superficie de aguas termales se puede disfrutar de cascadas, camas de agua, chorros, bancos, caldarium, camas de calor o baño turco. Además, está construido dentro de un jardín botánico precioso, con lo cual, a todos los beneficios que proporcionan sus aguas, se añade la contemplación de una exuberante y colorida naturaleza a través de sus enormes ventanales.
Este hotel balneario está situado en la isla de La Toja, en las Rías Baixas gallegas, frente al Grove y a 30 kilómetros de Pontevedra. Su construcción data de 1907 y el edificio responde al proyecto que en su día diseñó el arquitecto Daniel Vázquez Gulias. Actualmente, las instalaciones termales han sabido equilibrar la tradición y las técnicas más modernas en cada uno de los tratamientos que ofrecen con programas de salud y de belleza a la medida, medicina preventiva, terapias para combatir el cansancio y el agotamiento físico, entre otros. El entorno, rodeado del mar y de la naturaleza de la isla, es perfecto para dejarse llevar por este lugar y relajarse.
Las propiedades de las aguas termales de Panticosa ya eran apreciadas por los romanos en la época del emperador Tiberio. Estas modernas instalaciones se encuentran en alta montaña, a 1.636 metros sobre el nivel del mar, en Huesca. Los minerales del agua y su temperatura calman y rejuvenecen el cuerpo pero también el aire puro y la naturaleza de los Pirineos donde están inmersas proporcionan bienestar en todos los sentidos.
El balneario, que se alimenta de las aguas mineromedicinales del manantial de Tiberio que brotan a 53º C, consta de tres edificios: Termas de Tiberio, con más de 8.500 metros cuadrados dedicados al relax y a la belleza; el Balneario Termo Medicinal El Quiñón para deportistas; y el Espacio Termal Gran Hotel para tratamientos más exclusivos.
Entre las prestaciones destacan las técnicas para potenciar las defensas, el aparato respiratorio o las descontracturantes y relajantes o los tratamientos antiestrés, circulatorios, sedantes o complementarios contra la obesidad y la celulitis junto a medidas dietéticas. Incluso las instalaciones cuentan con una playa de arena natural con vistas al valle de Tena.
Este balneario se encuentra en el Paraje Natural de Valle de Ricote, junto al río Segura a su paso por Archena, en Murcia. El complejo termal abarca más de 200.000 metros cuadrados y pone a disposición del cliente un gran catálogo de servicios y tratamientos terapéuticos adecuados a cada dolencia y necesidad. Sus aguas minero-medicinales se clasifican como sulfurada-sulfatada-clorurada-sódica-cálcica.
Emanan de un manantial a 52,5º C y al tener un tiempo de permanencia bajo tierra de 15.000 años, las hacen únicas. Sus propiedades son excelentes para afecciones físicas y para la recuperación del bienestar, la relajación y el descanso, además mejoran las defensas y las articulaciones y facilitan la reparación de los tejidos dérmicos frente al envejecimiento.
El Balneario de Mondariz, en Pontevedra, se inauguró en 1873 y en los últimos años se ha transformado de tal modo que se ha convertido en uno de los referentes termales de todo nuestro país. Sus aguas carbogaseosas, bicarbonatado-cálcicas y ferruginosas que emanan a unos 18° C proporcionan grandes beneficios. Las instalaciones constan de unos 3.000 metros cuadrados y son un oasis para la relajación y el ocio acuático. Se pueden elegir diversos espacios como el SPA Palacio del Agua o el Circuito Celta, que además dispone de una curiosa y especial Sauna Celta. Es una original cueva de piedra que recrea las antiguas Pedras Formosas (piedras hermosas) de la civilización celta que vivió en Galicia.
Este espacio se localiza en la localidad zaragozana de Alhama de Aragón y está rodeado de naturaleza y de montañas. Dispone de fuentes termales y un lago termal que es el más grande de toda Europa y que se construyó sobre unos antiguos baños árabes del siglo XII. Además de poder sumergirse en estas aguas se ofrecen duchas de contraste, sauna seca y húmeda o tratamientos personalizados. Lo más destacable es el manantial y Baño del Moro y la mora que está datado del siglo XV, una piscina termal activa y el circuito de contrastes Aqualhama.