Del Ártico a un desierto de sal: cinco hoteles de lujo situados en entornos extremos

El lujo es más de lo que creemos. Por ejemplo, cuando imaginamos un hotel de lujo lo situamos en una localización idílica, con todas las comodidades, sin ninguna molestia, los mejores servicios… Pero también hay lujo para los más aventureros. Muchos viajeros buscan la sintonía entre el lugar que van a visitar y dónde van a dormir, la mayoría de ellos en entornos muy diferentes a lo que se está acostumbrado, solo aptos para los más inquietos y los que no dudan ni un segundo en aventurarse a vivir nuevas experiencias. Todo es posible en los entornos más extremos, hasta para el lujo, te mostramos algunos de esos hoteles tan especiales.

La aventura comienza en uno de los lugares más desconocidos y fríos del mundo, en Groenlandia. Este hotel se sitúa en pleno fiordo helado y ha sido en más de una ocasión punto de salida para algunas expediciones en el Ártico. Como tal, el hotel podría parece un edificio más en medio de la nieve, pero uno de sus principales atractivos son esas habitaciones dentro de una especie de iglús, totalmente preparados para no pasar frío y pasar unas noches únicas en uno de los lugares más recónditos del mundo. Entre otras cosas podrás admirar las impresionantes auroras boreales que reinan en las noches invernales, surcar la nieve en trineos o avistar las ballenas que nadan muy cerca de la costa en esas aguas congeladas.

Puede que no sea el mejor hotel de la lista, pero sí uno de los más curiosos por solo un motivo, necesitas saber bucear para acceder a las instalaciones. Este hotel de Florida era antes un laboratorio marino bajo el agua que se ha reconvertido para ofrecer algunas habitaciones con todas las comodidades que cualquier huésped necesitaría, y también todo el entretenimiento para no tener que salir buceando cada cinco minutos. ¿Necesitas que te traigan la cena o tienes algún problema? Tranquilo, porque no tendrás que salir de la habitación, los empleados llegarán hasta tu habitación buceando.

Nos vamos ahora hasta Bolivia, a uno de los hoteles más espectaculares del mundo que se sitúa junto al Salar de Uyuni, uno de los lugares más especiales del planeta, un manto blanco de sal que es un auténtico privilegio fotografiar por ese impresionante efecto espejo que deja la instantánea perfecta para Instagram. El hotel está en perfecta sintonía con el entorno, pues se construyó con miles de bloques de sal a los que se fue dando forma. Desde el hotel más salado pueden visitar el Salar en todoterrenos o admirar el famoso cementerio de trenes donde duermen abandonados bajo la luz del sol. Un paisaje misterioso a la vez que atractivo para cualquier viajero curioso.

Cambio de continente, nos mudamos a África, en concreto a Tanzania, a uno de los lugares más especiales del mundo. Un hotel del lujo rodeado completamente por la naturaleza y animales salvajes. Por eso mismo este hotel es perfecto para los amantes del lujo que no pueden dejar de lado la naturaleza, una unión que no desentona al respetar completamente el entorno. Cada día podrás salir en expediciones o safaris para avistar rinocerontes, leones, elefantes o diferentes aves de la zona.

Si quieres disfrutar del Tíbet, su cultura, tradiciones y gente, este campamento es ideal para ti y tu desconexión. Alojarse aquí es totalmente diferente a cualquier otro hotel que puedas haber visto antes empezando con su cocina, tradicional de la zona y con alimentos recogidos del entorno. Es una especie de retiro en el que todas tus preocupaciones desaparecerán conociendo la zona, su vegetación y fauna y adentrándote por completo en una cultura tan curiosa e interesante como lo es la tibetana.